En el lugar donde nació el pequeño roedor creen que el extraño evento es sinónimo de buen presagio.
Con asombro y como un buen presagio han tomado los pobladores chiclayanos del caserío Chacupe, en La Victoria, el nacimiento de un cuy con cinco patas.
El roedor de raza Perú, pesa en promedio de 200 gramos y se encuentra bien, a pesar de la manipulación del que es objeto, por parte de muchos curiosos que asombrados acuden a esta granja para confirmar la noticia.
Juan Luis Zumaeta propietario del galpón de criaderos de cuyes donde nació el roedor, precisó que esto significa un buen presagio para su producción, pero por tratarse de una malformación genética ha decidió donar su animal a los estudiantes de la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo para que lo analicen científicamente.
Un especialista de esta casa superior explicó que este extraño nacimiento es causa de una falla genética, debido al apareamiento por un cruce de razas.
Comparte esta noticia