La curiosa escena navideña, muy propia de tiempos modernos, se volvió rápidamente popular en YouTube.
(Agencia N+1 / Daniel Meza) El productor y estrella de YouTube Casey Neistat se disfrazó de Papá Noel, tomó una snowboard, alistó varias cámaras y un dron hecho a medida lo suficientemente poderoso para levantar a un humano, y se convirtió en el primer ser humano en ser llevado por los aires por un dron. La curiosa escena navideña, muy propia de tiempos modernos, se volvió rápidamente popular en YouTube, alcanzando 5 millones de visitas en 3 días.
Con la ayuda de la firma surcoreana Samsung, y de su amigo y también estrella de YouTube Jesse Wellens del canal Prankvsprank, Neistat alzó vuelo sobre una pequeña villa finlandesa y además, fue jalado por el aparato consiguiendo esquiar en las blancas pistas y colinas. Sin querer, estos individuos podrían haber inventado un nuevo deporte extremo.
La demostración no deja de tener espectáculo: como si se tratara de un filme de acción, el youtuber parece sostenerse en una sola mano de una cuerda mientras que el superdron lo levanta por los cielos. Sin embargo, la verdad es que está conectado a Janet -así se llama el drone inmenso- a través de un arnés que le sujeta todo el cuerpo. Puedes ver al detalle cómo este fue colocado en el detrás de cámaras.
El drone también cargó una cámara Samsung de 360 grados, y una versión del video en 360 grados será publicada pronto. El protagonista del video, de 35 años, además dirigió simultáneamente ocho cámaras. También debió confiar totalmente en el hombre a quien encargó operar el dron, para no estrellarse contra un árbol.
Esta persona, no cualquiera, fue Justin Oakes, un corredor de drones que dirige Dronework Studios, una empresa estadounidense que provee servicios de fotos o videos desde aviones no tripulados que también contribuyó con el proyecto. No se especificaron cifras cuantificando las capacidades del aparato, pero los creadores indicaron que la preparación antes del rodaje duró meses. Dichas pruebas incluyeron la medición del poder de los motores y baterías, el ensamblaje del dron y los ensayos con maniquíes de hasta 90 kilos.
No es la primera vez que se emplean drones para deslizarse a través de superficie. El experimento de Neistat recuerda mucho a cuando la compañía Freefly Systems empleó un drone para ayudar a un tablista a surfear sobre el agua.
Esta, tampoco es la única rareza que ha traído la combinación de la tecnología con el espíritu navideño. Los youtubers de FloteTest hicieron algo aun más excéntrico. Adjuntaron cuatro hélices un árbol navideño y lo lanzaron al cielo: el resultado fue un árbol de navidad volador.
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