Se debe combinar con una buena alimentación y ejercicios. Además, se debe recordar que en exceso puede traer consecuencias adversas.
El consumo moderado de cerveza tiene efectos positivos para la salud, aunque recuerde que en exceso puede traer efectos contrarios. Lo principal es que se combine con una buena alimentación y ejercicio para obtener grandes beneficios, según revela un informe de elmundo.es.
Ramón Estruch, doctor del Servicio de Medicina Interna del Hospital Clinic de Barcelona, es uno de los promotores de los beneficios de esta bebida. "Defendemos su consumo moderado siempre dentro del contexto de la dieta, es ahí donde se obtienen los verdaderos efectos positivos", afirma este especialista que forma parte del Comité Científico del Centro de Información Cerveza y Salud.
Beneficios
"El consumo moderado de cerveza tiene favorece al sistema cardiovascular", según señala el doctor en Nutrición y especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, Luis Serra.
“Ya que contiene polifenoles y antioxidantes naturales que son los responsables de "luchar" contra enfermedades cardiovasculares. También favorece la reducción de los fenómenos oxidativos, responsables del envejecimiento. La cerveza tiene aproximadamente la misma cantidad de estos compuestos que el vino, la sidra o el cava”, señala Serra y reitera que se logra los beneficios “siempre y cuando vaya acompañada de una buena alimentación”.
También, favorece al sistema inmunitario y en la salud ósea. "Es fundamental, además para ayudar a hidratarnos", agregó.
Efectos adversos
Todo en exceso es dañino. El consumo elevado de cerveza puede traer efectos negativos, si no la toma con moderación, esto debido al alcohol.
Los especialista recalcan que el consumo elevado pude traer como consecuencias la obesidad y un empeoramiento significativo del sistema inmunitario. También generara problemas sociales o laborales.
Si usted tiene familiares con problemas cardiovasculares o con problemas de alcohol, por lo que puede ser sensible a estas bebidas, no es recomendable su consumo.
"No deben tomar cerveza bajo ningún concepto aquellas personas que por tener una condición patológica como enfermedades hepáticas, renales, cardiovasculares, entre otras, su médico le tenga prohibido la ingesta", indicó la experta en Nutrición, Dayana Gomes.
La especialista recalca que una variedad de cervezas, como las que no tienen alcohol, representan un consumo inofensivo, a la vez que aporta mayor diversidad de sustancias nutritivas que muchos refrescos y bebidas procesadas.
Hay estudios que indican que favorece la producción de leche materna durante la lactancia. Además, la cerveza sin alcohol apenas tiene calorías y por esta misma razón puede ser una opción muy recomendable en dietas de adelgazamiento.
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