¿Sabes realmente cuál es la diferencia entre la pasión y el deseo hacia la pareja? Para entender de manera más clara ambos conceptos, RPP conversó con Pedro Rondón Navas, psicólogo especialista en terapia de parejas.
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Relación de pareja: ¿cómo diferenciar entre la pasión y el deseo?
¿Cómo diferenciar entre la pasión y el deseo sexual? El psicólogo Pedro Rondón, PhD en consejería en sexología, explicó en el programa Encendidos que la pasión es un "estado de locura" muy intenso cuya primera fase puede ser el enamoramiento. Intervienen acá muchas hormonas y muchos neurotransmisores como la dopamina, la serotonina, entre otros.
Puede llegar a ser tan intensa que, en algunos casos, la relación de pareja puede mantenerse solo por la pasión sin necesidad de que exista amor, afecto o sentimiento, mencionó Rondón en diálogo con RPP. Agregó que la pasión es patológica porque la persona "no razona" y "no se da cuenta de nada".
Hay otros casos donde las personas pueden iniciar una relación sin que haya pasión porque "les conviene" únicamente el estatus o el dinero de la pareja. "Puede ser también que te lleves bien con la persona, que estés contento con ella, que te guste, que la ames pero que no te produzca deseo ni pasión", aclaró Rondón.
Es importante tener en cuenta que la pasión puede disminuir a lo largo de la relación con la pareja dado que es cíclica y no siempre se va a mantener al mismo nivel. Por ello, es importante "despertarla" cada cierto tiempo a través de una buena comunicación o teniendo manifestaciones de afecto no sexuales, sino de intimidad fuera de la cama, como por ejemplo acariciando a la pareja o saliendo de la rutina.
El deseo, en tanto, es algo innato del ser humano y está relacionado con las ganas de tener actividad sexual con uno mismo o con otra persona. El deseo puede ser alto, medio o bajo, y dependerá del estado de ánimo, el estrés, las hormonas, entre otros factores.
Cabe señalar que el deseo es lo que motiva a una persona a buscar una pareja. Una vez que la consigue puede generarse una pasión intensa, pero a medida que pasa el tiempo se puede ir perdiendo dicha pasión en la relación.
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