¿Estás contando los días para disfrutar de tus merecidas vacaciones? Te damos cinco consejos para que cuides tu salud mientras te desconectas de la cotidianidad.
Diversos estudios han demostrado que las vacaciones tienen una repercusión positiva en la salud de las personas. El “recreo” laboral mejora los valores de la presión arterial, la calidad de sueño y disminuye los niveles de estrés.
Toma con responsabilidad y serenidad estos días de descanso para que tu cuerpo y mente reciban los beneficios de tu jornada de tregua laboral con los siguientes consejos.
1) Cuida tu alimentación
En estos días de relajo quizás lo que menos deseas es entrar a la cocina. La norma en las vacaciones es “comer en la calle”. Sin embargo, debes saber elegir el sitio dónde consumirás los alimentos. Evita los puestos de comida rápida al aire libre, ya que no resultan ser los establecimientos más higiénicos.
La comida en casa siempre es la más saludable. Puedes hacer de la preparación de un platillo un momento especial para compartir con familiares y amigos, donde todos participen del proceso de elaboración de la receta.
2) Protege tu piel
Antes de salir de casa, es importante que utilices protector solar. Que tu outfit esté compuesto de ropa ligera, gafas de sol, gorras o sombreros. La prevención ante la exposición al sol nunca está demás. No olvides llevar contigo una botella de agua potable a todas partes para evitar la deshidratación.
3) Usa ropa cómoda
Si vas de excursión o planeas disfrutar de una caminata al aire libre, utiliza prendas livianas que den paso a la transpiración. De esta manera, tu organismo mantendrá el equilibrio adecuado y podrás gozar de la naturaleza con libertad.
4) Realiza chequeos médicos
Aprovecha tus días de descanso para hacerte un chequeo médico y odontológico con el fin de constatar que todo esté en orden. Algunos exámenes de rutina requieren de tiempo. Estructura tu agenda de visitas al doctor para sentirte bien contigo mismo.
5) Entrena al aire libre
Las vacaciones están hechas para descansar y romper las rutinas. La mejor forma de liberar el estrés y descargar tensiones es volverse más activo. En estos días, apúntate a diversas actividades al aire libre como trotar, caminar, manejar bicicleta o nadar en tu playa favorita. Recuerda que al realizar ejercicios tu cuerpo libera endorfinas, lo que genera un estado constante de felicidad y placer en el que puedes disfrutar del entrenamiento y cuidar tu salud al mismo tiempo.
Después de estos días de relajación, regresarás a tu trabajo con las energías renovadas para asumir nuevos retos.
La responsabilidad del contenido y autoría del presente artículo es de RPP.
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