Recuerda que el COVID-19 no mata solo. Por eso, debemos cumplir todas las recomendaciones del Gobierno para evitar nuevos contagios y reducir la propagación del virus.
Ahora que las actividades cotidianas se reanudan gradualmente, debemos asumir nuestro compromiso para que la COVID-19 no se siga propagando en el país, en un contexto donde las reuniones familiares y sociales se presentan como los nuevos focos de contagio. De esta manera, es importante entender que con nuestras acciones podemos ser cómplices o héroes. Todo está en nuestras manos.
El principal objetivo hoy es evitar ser el vehículo que lleve el virus a nuestras casas y por eso, debemos seguir manteniendo las tres acciones más importantes para prevenir el contagio del COVID-19: el uso correcto de la mascarilla, el distanciamiento social y el lavado constante de manos con agua y jabón o, en su defecto, la desinfección con alcohol.
Además de esas recomendaciones, que deben ser cumplidas de manera obligatoria, se debe evitar la asistencia a todo tipo de reuniones: la pichanga, las visitas o las parrilladas, ya sea con familiares o amigos. Recuerda que el COVID-19 no hace diferencias y puede afectar a todos por igual, pero entre toda la población, los adultos mayores son los más vulnerables. Así, debemos actuar pensando en cuidarlos en todo momento.
¿Qué debemos hacer para no ser cómplices del COVID-19?
Hay que tener en cuenta que el COVID-19 se propaga de persona a persona, a través de gotitas o partículas acuosas que se quedan en el ambiente al toser o estornudar. Eso quiere decir que podemos contagiarnos fácilmente si mantenemos contacto físico con una persona infectada o si tomamos contacto con superficies contaminadas por el virus.
Es por eso que, si no quieres ser el vehículo que traslade al virus y lo lleve a casa, puedes seguir recomendaciones muy sencillas:
Usa correctamente la mascarilla: Antes de colocarte la mascarilla, lávate bien las manos durante 20 segundos como mínimo. Hay que tener en cuenta que la mascarilla es personal y al momento de usarla debe cubrir nuestra nariz y boca.
La mascarilla te protegerá. Evita manipularla y llevarla como vincha o en el cuello. Recuerda que, si necesitas acomodarla o retirarla, solo debes tocar las ligas o tiras. Para retirarla, debes lavarte nuevamente las manos. Así evitarás cualquier riesgo de contagio.
Lávate con agua y jabón, de manera constante: El lavado de manos es una de las medidas más efectivas y simples para prevenir enfermedades ocasionadas por bacterias y virus, como el causante del COVID-19. Por eso, hoy más que nunca, es importante lavarnos las manos de manera frecuente con agua y jabón durante 20 segundos, como mínimo.
Mantén el distanciamiento social: El distanciamiento social complementa el uso de mascarillas y el lavado de manos. Por eso, se recomienda mantener una distancia de más de un metro, al realizar nuestras actividades cotidianas.
Con orden y guardando la distancia estaremos más seguros al recibir las compras en la puerta de nuestro hogar y también cuando necesitemos ir a abastecernos en los mercados y supermercados.
Viaja con responsabilidad: Procura salir de casa solo si es indispensable o por motivos de trabajo. Al hacerlo, programa bien tu tiempo para desplazarte sin apuro. Si presentas síntomas de COVID-19, como fiebre, dolor de garganta, tos, dificultad respiratoria y pérdida de gusto u olfato, es mejor no salir de casa.
Es importante llevar siempre nuestra mascarilla, protector facial y alcohol en gel o alcohol de 70 grados. En el paradero, debemos ubicarnos en las zonas señaladas y mantener siempre la distancia.
Al subir y bajar del bus, debemos hacerlo de manera ordenada, procurando estar en lugares ventilados y tratar de tocar las superficies del vehículo lo menos posible. Asimismo, durante el viaje, no debemos manipular la mascarilla, el protector facial ni tocarnos el rostro. Recuerda que el virus ingresa al organismo a través de los ojos, nariz y boca.
Usa bicicleta para trasladarte: En tiempos de coronavirus, la bicicleta se ha convertido en el medio de transporte ideal, ya que evita aglomeraciones de personas y garantiza el distanciamiento social. Además, no afecta al medio ambiente y trae beneficios para la salud.
Por eso, es necesario desinfectarla antes y después de cada uso. Además, debemos planificar bien nuestra ruta, optando por calles o avenidas de poca aglomeración y priorizando siempre el uso de ciclovías. En este vehículo, la distancia adecuada es de cinco metros, entre un ciclista y otro.
Todas estas recomendaciones son sencillas de cumplir, solo se necesita del compromiso de cada uno de nosotros. Hacerle frente al COVID-19 y evitar más contagios está en nuestras manos.
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