Ben-Hur es un clásico por estas fechas. La película ganadora de 11 Oscar también ha tenido errores que los cinéfilos notaron con los años.
No hay Semana Santa sin Ben-Hur. El clásico del cine del año 1959, protagonizado por Charlton Heston y dirigida por William Wyler ha ganado 11 premios de la Academia y ha soportado del paso de los años desde su estreno (58, para ser exactos).
La película es considerada como una de las mejores de la historia, y en sus dos horas y media de duración recorre la travesía de venganza de Judá Ben-Hur, hijo de una familia noble de Jerusalén, contra Mesala, un antiguo amigo que termina convirtiéndose en un su enemigo irreconciliable, pues Ben-Hur es acusado de atentar contra la vida del nuevo gobernador romano, y Mesala lo encarcela a él y a su familia.
'Ben-Hur' contó con el mayor presupuesto que hasta entonces había tenido una película (más de quince millones de dólares), y para su filmación se construyeron los decorados más grandes jamás empleados en un filme.
Tomaron meses de preparación para los actores y más de un año de trabajo de producción para desarrollar esta cinta, que fue realizada en una época crucial para distribuidora Metro Goldwyn-Mayer, pues se encontraba al borde de la quiebra.
Sin embargo, hasta a los más grandes (en este caso, William Weyler) se les pueden escapar algunos detalles, que los cinéfilos han ido anotando después de muchas repeticiones durante años.
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