Rosa Montero vive su mejor momento como escritora: “Estoy en mi máxima década”

Con más de una treintena de libros, entre periodismo y literatura, la escritora española Rosa Montero publicó este año su última novela, titulada “La buena suerte”. Una ficción que fue tema central de la charla que sostuvo este 7 de noviembre con el periodista Renato Cisneros durante la edición virtual del Hay Festival Arequipa 2020.

La conversación, sin embargo, empezó con un tema de actualidad: la derrota de Donald Trump y el ascenso de Joe Biden como próximo presidente de Estados Unidos. Un panorama que, para Montero, dibuja un futuro más optimista para el país norteamericano y representa “la primera notica buena en este año asqueroso”.

“A ver si esto sirve para bajar un poco el pistón en el mundo de esa maraña de mentiras, fake news, que lo que intentan es fomentar la agresividad, el odio, la división y la crispación. Ojalá esto indique un cierto cambio mundial”, aseveró la autora como síntoma de los nuevos tiempos que marca la era Biden como mandatario estadounidense.

Aunque la elección del candidato demócrata prometa enderezar el camino de Estados Unidos hacia la libertad del pensamiento, para Montero quedan rezagos del pensamiento que Trump encarna en sus partidarios. No obstante, aclaró que no vale simplificar su ideología ni subestimar el poder que ejercen.

“Creen la falsa pureza del dogma populista”, dijo la escritora, porque Donald Trump les ofrecía un sentido de pertenencia a una comunidad que comparte el miedo y odio hacia el otro, en este caso, el foráneo. En ese sentido, toca estar atento con este electorado los próximos años.

UNA IMAGEN IMPULSA UN LIBRO

Ya entrada la charla en terrenos más literarios, Rosa Montero se pronunció sobre el origen de su última novela. ¿Cómo nació “La buena suerte”? Nada menos que durante un viaje en tren que la escritora realizó al interior de España. Fue entonces que ella vio el letrero de una casa en venta, en un lugar inhóspito.

La imagen, de la que se quedó prendada los días sucesivos, le bastó para imaginar a un hombre que bajaba de ese tren para comprar aquella vivienda, huyendo quizás de sus fantasmas del pasado. Y el resultado fue un libro de misterios que, según comentó Montero, dialoga sin querer con la cuarentena producida por la pandemia.

“Tiene una serie de connotaciones que van al hilo de este tiempo que estamos viviendo, que son completamente casuales y vienen de la magia de la literatura. La buena noticia es que este hombre que ha visto su vida destruida y tiene que volver a reconstruirla, pues en la novela lo consigue”, apuntó.

Ese personaje se llama Pablo, en “La buena suerte”, y el pueblo al que llega para rehacer su existencia es Pozonegro. Pero allí, en vez de desaparecer, este hombre encontrará personas que alumbrarán su ensombrecida vida, como es Raluca, la pintora de caballos que alumbra su vida, aunque también arrastra sus secretos.

EL MEJOR MOMENTO DE ROSA MONTERO

El poder, la memoria, la familia, “la infancia como un lugar del que hay escapar”, el amor y, ante todo, la lucha entre el bien y el mal, son algunos de los temas que obsesionan a Rosa Montero y componen muchas de sus creaciones. Tópicos a los que vuelve siempre con el afán de “encontrar una manera más profunda, exacta y bella de explicarte esas historias”.

Porque algo dejó claro la autora de “La loca de la casa” y es que ella escribe para aprender y “poner un poco de luz en esas obsesiones”. En esa línea, con muchos años de trayectoria, se dio cuenta hace poco que todas sus novelas giran en torno a historias de supervivientes. “Todas mis novelas tienen luz al final, pueden tener mucha negrura, pero tienen esperanza y luz”, puntualizó.

En ese sentido, explicó que ahora es consciente de lo luminosas que pueden llegar a ser sus últimas publicaciones, sobre todo desde “La ridícula idea de no volver a verte” en adelante. Una conclusión a la que llegó precisamente cuando se siente en su mejor momento como escritora. “Estoy en mi máxima década”, sentenció.

“Escribir es un oficio y una artesanía. A escribir se aprende escribiendo. Es como el carpintero que cuando empiezas vas a hacer las patas de un sofá y te sale cada una distinta y hecha un churro, pero cuando llevas cuarenta y tantos años haciendo patas, pues ya te salen todas igualitas y torneaditas y tan monas”, contó.

Así, Montero siente que desde tres novelas anteriores a “La buena suerte” su “artesanía a la hora de escribir” tiene una potencia sin igual. Sus lectores, que ansían tener pronto una nueva muestra del oficio de la escritora, deberán esperar hasta el próximo ensayo que, según reveló la autora, tratará sobre creación y locura. A estar atentos.