El actor, quien protagoniza la obra para bebes "Plop y Wiwi", asegura que vive una de sus mejores etapas en el teatro.
“Plop y Wiwi”, pieza teatral dirigida por Els Vandell estrenada en 2016, presenta su cuarta temporada y continúa apostando por renovar el teatro para bebes.
Esta revolucionaria obra cuenta cómo nace la amistad entre Plop (Jesús Alzamora) y Wiwi (Patricia Barreto), quienes en 45 minutos atrapan a su público infantil a través de la estimulación de los sentidos, trasmitiendo sensaciones con la simpleza del movimiento y los sonidos: toda una experiencia para padres y bebes.
“A los bebes no les importa reír si les nace, saltar o venir donde tú estás y esa experiencia para un actor es increíble. Cada función es como una clase intensiva de improvisación a base de estímulos que ellos nos brindan”, asegura Jesús Alzamora a RPP Noticias, con la convicción de vivir una de sus mejores experiencias en las tablas.
El actor confiesa que su hijo, quien ya cumplió su primer año de vida, ha sido fundamental para la creación de su personaje y de su manera de desenvolverse en el escenario. “He tomado prestado de mi hijo muchísimas conductas para darle vida a mi personaje, que aunque no habla, tiene que comunicar muchas cosas que la narrativa de ‘Plop y Wiwi’, requiere. Y me encanta tener que hacerlo sin palabras. Es un nuevo reto para mí como actor”, agrega Alzamora.
Uno de los más grandes retos que se plantea esta obra de teatro es cautivar al público adulto que asiste con sus bebés. Esto asegura que padres e hijos se sumerjan en su propia burbuja de aprendizaje y autodescubrimiento. “La ternura no tiene edad, tampoco una historia bien contada. Los adultos alguna vez fueron bebés y reconocen como yo [como padre] lo que los bebés hacen en su día a día. Así que ellos por un momento se acogen a la convención y vuelven a ser bebés con nosotros”, agregó el actor.
Alzamora también sostiene que hacer este tipo de teatro es una “tarea compleja” y el éxito de la misma se debe porque a través de la actuación y la música “respetan” al bebé. “No buscamos hacerlo reír a la fuerza, sino buscar entrar en su mente con un trabajo que lo estimule de alguna manera”, señaló.
El intérprete de Plop aplaude la realización de obras como esta y espera que en el futuro se presenten más piezas teatrales dirigidas a los infantes. “De alguna manera este tipo de teatro puede contribuir a la curiosidad de los bebes y a recibir estímulos que más adelante les sirvan para sus vidas. El teatro tiene que seguir un espacio social para que la gente reflexione y aprenda cosas que puedan convertirlas en mejores personas y creo que 'Plop y Wiwi' lo logra con las mentes más puras que hay: los bebes”.
La obra se presenta los sábados y domingos a las 11 a.m. y 12 p.m., la temporada va hasta el 3 de junio en el Teatro La Plaza.
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