Al comprar un foco LED crees que estás gastando más, pero en realidad estás apostando por el ahorro a largo plazo.
Uno de los motivos más recurrentes de los consumidores para no comprar lámparas LED e incluso focos ahorradores, tiene que ver con costo inicial. Un foco LED cuesta en promedio S/.30 soles y este precio es 20 veces mayor que el precio de un foco incandescente.
Según información del Ministerio de Energía y Minas (Minem), si revisamos el consumo de electricidad mensual de una vivienda, considerando el precio más bajo de la electricidad en Perú (0,32 soles/kWh para usuarios de la tarifa subsidiada que consumen menos de 30 kWh al mes), vemos que al sustituir una lámpara incandescente por un foco LED el consumo se reduce en 8 kWh, y la factura mensual se reduce en S/.2.5.
Con este ahorro de 2.5 mensuales en tu factura, los S/ 30 soles pagados se recuperan en 12 meses (el resto de los consumidores lo recuperan más rápido porque su tarifa es más alta). Durante toda la vida del foco LED, al consumir menos electricidad, las emisiones de CO2 de las centrales generadoras se reducen en 2,2 kg mensuales por cada incandescente sustituido.
En el caso de las lámparas LED, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) considera que la diferencia de precio se explica porque su uso en las viviendas peruanas es todavía incipiente. Cuando se masifiquen estas lámparas, su precio tenderá a bajar, lo que beneficiará aún más a los usuarios.
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