La energía se producirá a través de una turbina GE y generará hasta 45 mega watts
Como una prueba más del férreo compromiso
con la utilización de energías renovables, GE y la compañía de energía federal
Petrobras, inauguraron hoy una turbina de gas inédita en el mundo que genera
electricidad a partir de etanol, combustible derivado de la caña de azúcar.
Su puesta en marcha tendrá lugar en la termoeléctrica que Petrobras opera en Juiz de Fora, municipio ubicado en el estado de Minas Gerais, y representará un hito para el país carioca. El etanol, producido sobre la base de la caña de azúcar, es una de las formas de hidrocarburo renovable más eficientes que existen en la actualidad.
Los beneficios de este combustible alternativo son significativas: suponen una fuente de energía renovable y su combustión reduce las emisiones atmosféricas e comparación con las de los combustibles fósiles, especialmente de los óxidos de nitrógeno.
La planta de gas natural de Juiz de Fora (a 180 km de Río de Janeiro) es de ciclo simple y tiene una capacidad de 87 MW. Cuenta además con dos turbinas GE LM6000 a base a gas, y en una de ellas GE realizó complejos cambios en el diseño de la cámara de combustión, de manera que el uso de etanol fuera factible.
Estos cambios potencian la seguridad energética de la planta y su confiabilidad proveyendo de una fuente de energía alternativa. Siendo el segundo productor mundial de etanol y el mayor exportador del mundo de este producto, Brasil se beneficiará con la incorporación de este combustible para la generación térmica, en gran parte gracias a la abundancia de este hidrocarburo.
La experiencia de 35 años con que cuenta el país carioca en lo que se refiere al uso de etanol, está basada en la eficiencia agrícola del cultivo de la caña de azúcar, llegando a producir 7.300 barriles por año según datos del Gobierno Federal. Habrá cinco meses de pruebas para certificar que el uso de etanol es válido como fuente alternativa de combustible en este tipo de instalaciones, así como también para asegurar que las emisiones están dentro de los límites esperados.
GE está contribuyendo con la conversión tecnológica, la ingeniería y el apoyo de planta durante la conversión y la puesta en marcha del proyecto. "Este tipo de colaboración demuestra el amplio desarrollo que puede ser alcanzado para proveer soluciones económicas y medioambientales para nuestros clientes", dijo Darryl L. Wilson, presidente y CEO de Aeroderivative Gas Turbines (turbinas de gas aero derivadas) para GE Power & Water.
"Nuestro objetivo es ser líderes en generación de energía eficiente y confiable de fuentes de combustible alternativas para colaborar con las necesidades de nuestros clientes y continuaremos la incesante búsqueda de este tipo de oportunidades colaborativas para desarrollar esas soluciones".
Su puesta en marcha tendrá lugar en la termoeléctrica que Petrobras opera en Juiz de Fora, municipio ubicado en el estado de Minas Gerais, y representará un hito para el país carioca. El etanol, producido sobre la base de la caña de azúcar, es una de las formas de hidrocarburo renovable más eficientes que existen en la actualidad.
Los beneficios de este combustible alternativo son significativas: suponen una fuente de energía renovable y su combustión reduce las emisiones atmosféricas e comparación con las de los combustibles fósiles, especialmente de los óxidos de nitrógeno.
La planta de gas natural de Juiz de Fora (a 180 km de Río de Janeiro) es de ciclo simple y tiene una capacidad de 87 MW. Cuenta además con dos turbinas GE LM6000 a base a gas, y en una de ellas GE realizó complejos cambios en el diseño de la cámara de combustión, de manera que el uso de etanol fuera factible.
Estos cambios potencian la seguridad energética de la planta y su confiabilidad proveyendo de una fuente de energía alternativa. Siendo el segundo productor mundial de etanol y el mayor exportador del mundo de este producto, Brasil se beneficiará con la incorporación de este combustible para la generación térmica, en gran parte gracias a la abundancia de este hidrocarburo.
La experiencia de 35 años con que cuenta el país carioca en lo que se refiere al uso de etanol, está basada en la eficiencia agrícola del cultivo de la caña de azúcar, llegando a producir 7.300 barriles por año según datos del Gobierno Federal. Habrá cinco meses de pruebas para certificar que el uso de etanol es válido como fuente alternativa de combustible en este tipo de instalaciones, así como también para asegurar que las emisiones están dentro de los límites esperados.
GE está contribuyendo con la conversión tecnológica, la ingeniería y el apoyo de planta durante la conversión y la puesta en marcha del proyecto. "Este tipo de colaboración demuestra el amplio desarrollo que puede ser alcanzado para proveer soluciones económicas y medioambientales para nuestros clientes", dijo Darryl L. Wilson, presidente y CEO de Aeroderivative Gas Turbines (turbinas de gas aero derivadas) para GE Power & Water.
"Nuestro objetivo es ser líderes en generación de energía eficiente y confiable de fuentes de combustible alternativas para colaborar con las necesidades de nuestros clientes y continuaremos la incesante búsqueda de este tipo de oportunidades colaborativas para desarrollar esas soluciones".
Comparte esta noticia