Numerosos compañeros la despidieron entre lágrimas y recuerdos de esta actriz que nació en Cuba pero que forma parte del panteón de artistas mexicanos.
La actriz Carmen Montejo, quien murió el lunes a los 87 años, recibió un emotivo homenaje de cuerpo presente en el palacio de Bellas Artes, el máximo recinto cultural de la capital mexicana. De ese modo volvió por última vez al escenario en el que debutó en teatro antes de convertirse en uno de los íconos del cine de oro mexicano.
La actriz, cuyo verdadero nombre era María Teresa Sánchez González se presentó por primera vez en ese escenario en 1946, cuando participó en "La casa de Bernarda Alba".
Como si se tratara de una presentación más de Montejo, el vestíbulo del recinto lleno de arreglos florales, se volvió a inundar de aplausos cuando colegas, autoridades y público en general recibieron el féretro.
La primera actriz Silvia Pinal, con la que Montejo convivió en la época del cine de oro, encabezó entre lágrimas la primera de varias guardias de honor; la actriz Cristina Muñoz; María Montejo, la única hija de la actriz, y otros familiares de la estrella.
Las actrices Laura Zapata y Diana Bracho también participaron en las guardias, entre las que destacó la que montaron algunas integrantes de la Fundación Rosa Mexicano, creada en los años 70 por la extinta y la actriz Dolores del Río con la finalidad de cuidar a los hijos de sus colegas en el gremio actoral.
Nacida en 1925 en Pinar del Río, Cuba, Montejo probó casi todos los géneros y escenarios posibles. Su prolífica carrera, que incluyó actuaciones en producciones estadounidenses e italianas, comenzó durante su adolescencia en la radio mexicana.
Participó en cintas consideradas clásicas como "Nosotros los pobres" y "¿Qué te ha dado esa mujer" en la que interpretó a Yolanda, la protegida de Pedro Infante.
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