El actor dijo que con su banda de rock busca una nueva relación con el público, una nueva forma para que reciban algo más de él. La agrupación se llama Modern West.
Kevin Costner & Modern West es la reinvención en forma de banda de rock del actor estadounidense: "Quiero redefinir mi relación con el público, que reciba de mí algo más que un autógrafo", dice a Efe.
Aunque pocos lo sabían, Kevin Costner, quien actúa hoy en Madrid en el marco de su gira europea, lleva 20 años tocando con amigos. Su afición se convirtió en otra más de sus facetas profesionales por estricta recomendación marital.
"Mi mujer fue la que me metió en la música -explica el actor-. Estuvo tres años seguidos diciéndome que cuando tocaba me veía más feliz que de ningún otro modo y yo nunca hacía caso, hasta que un día probé sobre un escenario y a la gente pareció gustarle..."
Para su mutación en estrella de rock se rodeó de "viejos amigos con los que sobrellevar lo duro que es la vida en la carretera". Entre ellos John Coinman y Teddy Morgan, a quienes conoció en los años 80 en un taller de interpretación.
Ahora, la mezcla de folk con reminiscencias country de Kevin Costner & Modern West, sonido que a él le gusta definir como "rock del oeste americano", llega por primera vez a Europa, coincidiendo con el lanzamiento de su segundo disco, "Turn it on", que sale a la venta a este lado del Atlántico el próximo 22 de febrero.
"Nunca he tocado en España y estoy deseando ver la cara de la gente -apunta-. La última vez que estuve en Madrid fue para presentar "Thirteen Days" y recuerdo lo pasional que es la gente allí".
Tras la cita madrileña y dos más en Barcelona, su banda recorrerá el continente europeo haciendo parada en Francia, Luxemburgo, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Alemania, Austria, Polonia y Eslovaquia.
Entre las referencias de su libro de estilo sonoro se encuentran dos artistas muy respetados para el público español, Bruce Springsteen y Bob Dylan, a los que se suma la ambición melódica de la Mowtown y del resto de corrientes musicales de la década de los 60, recapitula la estrella de Hollywood.
Sobre el escenario, el protagonista de "Dances with Wolves" busca "estar con la gente sin cortapisas, atraer a otro tipo de público más allá que el de las películas", aunque confiesa que "va a ser duro tocar canciones nuevas durante dos horas sin que la gente se marche".
Defiende no ser otra de esas estrellas de cine con afición a la guitarra, como Keanu Reeves o Russell Crowe, aunque su éxito en Alemania, donde tiene programadas hasta quince fechas, recuerda al que en su día disfrutó David Hasselhoff. "Es amigo, pero nosotros hacemos algo más que versiones, de lo contrario no merecería el precio de la entrada", asegura.
La banda ya conoció el éxito de forma inesperada en Japón a mediados de los 80, con dos canciones grabadas expresamente para anuncios televisivos que se hicieron muy populares sin que ellos apenas se enteraran, "Simple Trip" y "Tokio Convertible", confirma el intérprete, que no había cantado antes en el cine hasta "Swing vote", en 2008.
Conocido por controlar lo más posible todos los aspectos de sus proyectos, el Kevin Costner melómano se dejó ver en "The Bodyguard".
"Para el tema principal de la banda sonora pensé en un clásico de la Mowtown, "What becomes of the broken hearted", de Jimmy Ruffin, pero ya había sido usada en otra película", recuerda. Por eso optó por una balada country de Dolly Parton.
Esa canción era "I will always love you", que se convirtió en el mayor éxito en la carrera musical de Whitney Houston, que a su vez tuvo lugar en su más recordada incursión cinematográfica.
"Teniendo en cuenta que fui yo quien también decidió que Houston fuera mi compañera de reparto podemos decir que ella me debe buena parte de su estatus profesional", bromea entre risas el actor cuando se le recuerdan estos datos.
EFE
Aunque pocos lo sabían, Kevin Costner, quien actúa hoy en Madrid en el marco de su gira europea, lleva 20 años tocando con amigos. Su afición se convirtió en otra más de sus facetas profesionales por estricta recomendación marital.
"Mi mujer fue la que me metió en la música -explica el actor-. Estuvo tres años seguidos diciéndome que cuando tocaba me veía más feliz que de ningún otro modo y yo nunca hacía caso, hasta que un día probé sobre un escenario y a la gente pareció gustarle..."
Para su mutación en estrella de rock se rodeó de "viejos amigos con los que sobrellevar lo duro que es la vida en la carretera". Entre ellos John Coinman y Teddy Morgan, a quienes conoció en los años 80 en un taller de interpretación.
Ahora, la mezcla de folk con reminiscencias country de Kevin Costner & Modern West, sonido que a él le gusta definir como "rock del oeste americano", llega por primera vez a Europa, coincidiendo con el lanzamiento de su segundo disco, "Turn it on", que sale a la venta a este lado del Atlántico el próximo 22 de febrero.
"Nunca he tocado en España y estoy deseando ver la cara de la gente -apunta-. La última vez que estuve en Madrid fue para presentar "Thirteen Days" y recuerdo lo pasional que es la gente allí".
Tras la cita madrileña y dos más en Barcelona, su banda recorrerá el continente europeo haciendo parada en Francia, Luxemburgo, Suecia, Finlandia, Dinamarca, Alemania, Austria, Polonia y Eslovaquia.
Entre las referencias de su libro de estilo sonoro se encuentran dos artistas muy respetados para el público español, Bruce Springsteen y Bob Dylan, a los que se suma la ambición melódica de la Mowtown y del resto de corrientes musicales de la década de los 60, recapitula la estrella de Hollywood.
Sobre el escenario, el protagonista de "Dances with Wolves" busca "estar con la gente sin cortapisas, atraer a otro tipo de público más allá que el de las películas", aunque confiesa que "va a ser duro tocar canciones nuevas durante dos horas sin que la gente se marche".
Defiende no ser otra de esas estrellas de cine con afición a la guitarra, como Keanu Reeves o Russell Crowe, aunque su éxito en Alemania, donde tiene programadas hasta quince fechas, recuerda al que en su día disfrutó David Hasselhoff. "Es amigo, pero nosotros hacemos algo más que versiones, de lo contrario no merecería el precio de la entrada", asegura.
La banda ya conoció el éxito de forma inesperada en Japón a mediados de los 80, con dos canciones grabadas expresamente para anuncios televisivos que se hicieron muy populares sin que ellos apenas se enteraran, "Simple Trip" y "Tokio Convertible", confirma el intérprete, que no había cantado antes en el cine hasta "Swing vote", en 2008.
Conocido por controlar lo más posible todos los aspectos de sus proyectos, el Kevin Costner melómano se dejó ver en "The Bodyguard".
"Para el tema principal de la banda sonora pensé en un clásico de la Mowtown, "What becomes of the broken hearted", de Jimmy Ruffin, pero ya había sido usada en otra película", recuerda. Por eso optó por una balada country de Dolly Parton.
Esa canción era "I will always love you", que se convirtió en el mayor éxito en la carrera musical de Whitney Houston, que a su vez tuvo lugar en su más recordada incursión cinematográfica.
"Teniendo en cuenta que fui yo quien también decidió que Houston fuera mi compañera de reparto podemos decir que ella me debe buena parte de su estatus profesional", bromea entre risas el actor cuando se le recuerdan estos datos.
EFE
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