Actriz explicó que comenzó en el cine a los 15 años, lo que le obligó a abdicar de su juventud. ´No se puede tener todo en la vida, aunque intenté aprovecharla al máximo´.
La actriz italiana Sofía Loren negó hoy que su vida haya sido fácil y apuntó que nunca se ha arrepentido de nada a lo largo de sus cinco décadas de carrera profesional.
Loren se encuentra en Portugal para recibir el premio a toda una carrera del festival "Douro Films Harvest", organizado por cuatro pequeños pueblos portugueses ubicados en el valle del río Duero.
Se trata de la segunda edición del primer festival internacional de cine en la región, que es conocida por sus plantaciones de uva que producen el famoso vino dulce de Oporto.
Al recoger el premio, la actriz explicó que comenzó en el cine a los 15 años, lo que le obligó a abdicar de su juventud.
"No se puede tener todo en la vida, aunque intenté siempre aprovecharla al máximo", declaró, aunque se consideró una afortunada por haber rodado "tantas historias bellas".
"En mi carrera me encontré a hombres como Vittoria de Sica o mi marido -Carlo Visconti- que consiguieron entender lo que podía dar yo al cine", indicó la italiana.
La actriz reconoció que le resulta imposible escoger uno solo de los personaje que ha interpretado, pero sí señaló que dos de las películas que más le han marcado son "La Ciociara" y "Matrimonio all"italiana"
A pesar de que ha tenido éxito en el cine a ambos lados del Atlántico, dijo que prefiere trabajar donde están sus amigos, sus raíces, su continente. "Por eso mis películas con más éxito fueron rodadas en Europa".
En su discurso, la musa italiana, conocida por su belleza, restó valor al papel que ésta he tenido en su carrera.
"La belleza no hace daño, al contrario, pero no es suficiente; es necesario tener algo dentro", argumentó.
Sophia Loren, de 75 años, concluyó su intervención diciendo que prevé un futuro "bonito" y recordó que siempre le gusta citar la frase final de "Gone With the Wind": "Francamente, no me importa nada".
EFE
Loren se encuentra en Portugal para recibir el premio a toda una carrera del festival "Douro Films Harvest", organizado por cuatro pequeños pueblos portugueses ubicados en el valle del río Duero.
Se trata de la segunda edición del primer festival internacional de cine en la región, que es conocida por sus plantaciones de uva que producen el famoso vino dulce de Oporto.
Al recoger el premio, la actriz explicó que comenzó en el cine a los 15 años, lo que le obligó a abdicar de su juventud.
"No se puede tener todo en la vida, aunque intenté siempre aprovecharla al máximo", declaró, aunque se consideró una afortunada por haber rodado "tantas historias bellas".
"En mi carrera me encontré a hombres como Vittoria de Sica o mi marido -Carlo Visconti- que consiguieron entender lo que podía dar yo al cine", indicó la italiana.
La actriz reconoció que le resulta imposible escoger uno solo de los personaje que ha interpretado, pero sí señaló que dos de las películas que más le han marcado son "La Ciociara" y "Matrimonio all"italiana"
A pesar de que ha tenido éxito en el cine a ambos lados del Atlántico, dijo que prefiere trabajar donde están sus amigos, sus raíces, su continente. "Por eso mis películas con más éxito fueron rodadas en Europa".
En su discurso, la musa italiana, conocida por su belleza, restó valor al papel que ésta he tenido en su carrera.
"La belleza no hace daño, al contrario, pero no es suficiente; es necesario tener algo dentro", argumentó.
Sophia Loren, de 75 años, concluyó su intervención diciendo que prevé un futuro "bonito" y recordó que siempre le gusta citar la frase final de "Gone With the Wind": "Francamente, no me importa nada".
EFE
Comparte esta noticia