Clasificar a Rusia 2018 le daría un nuevo impulso a la economía peruana

Desde hace tres años se habla del fin de la época de bonanza en el Perú. Para un país cuya economía se basa principalmente en la exportación de minerales, que China compre cada vez menos y que los precios hayan bajado es un pésimo negocio. Pocos se han animado a jugársela por una fórmula para revertir una situación nada alentadores, pese a que el Gobierno de Pedro Pablo Kuczynski se ha puesto como meta inmediata la reactivación económica. Lo que nadie preveía era que el impulso podría llegar gracias a una treintena de jugadores de fútbol y un entrenador argentino (cuerpo técnico, utileros y personal administrativo incluídos).

La Selección está quinta en las Eliminatorias y una victoria este martes ante Colombia, sumada a otros resultados, le daría una clasificación directa a Rusia 2018. Para Rolando Arellano, gerente de Arellano Marketing, si Perú va al Mundial se dinamizarían la actividad económica y crecería el Producto Bruto Interno (PBI). “En el corto plazo habrá efectos en el consumo más básico. Aumentarían las salidas a la calle, a los restaurantes y a los centros comerciales. La venta de artefactos también mejoraría. Siempre que hay un Mundial crecen la venta de televisores. Si Perú clasifica, es probable que se disparen”.

Esperanza económica. Desde el gobierno de Alejandro Toledo, que tuvo a Kuczynski como ministro del sector, la economía peruana creció de forma sostenida. El pico llegó en el 2008, durante el segundo periodo de Alan García, con un PBI del 9.8%. Al año siguiente, afectado por la crisis internacional, se redujo a 0.9%. Si bien escaló hasta 8.8% en 2010, desde entonces ha ido disminuyendo. El segundo punto más bajo del siglo llegó en 2014, con un PBI del 2.4%. Tras los efectos del caso Lava Jato y el Fenómeno El Niño, el Banco Central de Reserva (BCR) estima que en 2017 será del 2.8%.

Clasificar al Mundial luego de 36 años, podría ser un factor decisivo para alcanzar mejores cifras en sectores como comercio y servicios, que apenas mostraron crecimiento de 1% este año. “Jugar en Rusia 2018 sería un empujón. Si la economía va creciendo, esto empujaría la confianza de los consumidores”, opina Arellano.

Empresa y consumidor. El entusiasmo se sentiría tanto en el consumidor como el empresario, el otro gran actor en la economía. El pase a Rusia dispararía el valor bursátil de determinadas compañías, según Marco Antonio Zaldivar, presidente de la Bolsa de Valores de Lima (BVL). “Si hay mayores expectativas de crecimiento para una empresa, su valor en la Bolsa crece. Esa es la base para trazar el precio de las acciones".

La bolsa limeña acumula un crecimiento superior al 20% en lo que va de 2017, gracias a un reciente repunte del precio de los metales. Sin embargo, la clasificación apuntalaría sobre todo los sectores vinculados a la demanda interna. “Tienes crecimiento en sectores de banca, en el consumo masivo y en el área comercial. Siempre en un Mundial, por ejemplo, crece la venta de televisores. Imagínate si Perú clasifica”.

Si gana Perú, ganamos todos. Son muchos los sectores que pueden entrar en armonía con el fútbol. Arellano asegura que de lograrse la clasificación aumentaría la venta de bebidas alcohólicas, prendas de vestir y merchandising de la selección, celulares inteligentes para ver los encuentros en cualquier lugar, compras a mediano y largo plazo. “La percepción de riesgo bajaría y probablemente impacte en sectores como construcción, educación. Probablemente también se vendan más vehículos”.

“Si clasificas tienes seis o siete meses de una luna de miel de expectativas", agrega Zaldivar sobre los efectos inmediatos que tendría una victoria del Perú ante Colombia. "El mundial es muy rápido, dura 30 días para los finalistas y para algunos solo una semana, pero las expectativas anteriores ayudan muchísimo a mover la economía por la euforia que traen”.