Thiago Alcántara del Bayern Munich es un jugador fino con el balón pero cuando tiene que pegar lo hace y no vas a creer cómo atacó a Stefan Kiessling del Bayer Leverkusen por los cuartos de la Copa Alemania.
El exjugador del Barcelona levantó la pierna y aplicó la plancha a la altura del pecho a su rival, pero cuando todo hacía ver que era una clara roja, el árbitro del partido le puso paños fríos al asunto y puso una amarilla.
Kiessling no pudo seguir en la cancha y en su lugar entró Josip Drmic, sin duda una imprudencia que el juez principal dejó pasar por alto. Pasa en todos lados.
Además de la patada, Thiago Alcántara marcó el penal de la victoria para los bávaros (5-3) definición que les permite avanzar a semifinales de la Copa Alemania.
