Los jugadores de Boca Juniors realizaron una prueba para comprobar si las lunas del bus se rompen o no. Aquí te contamos los resultados.
Más vale prevenir que lamentar. Nueve meses han pasado desde el ataque, con piedras y botellas, que sufrió el bus que trasladaba al plantel de Boca Juniors al Monumental de Núñez previo al duelo contra River Plate por la final de la Copa Libertadores 2018. Esa escena aún está fresca en la interna del cuadro xeneize, por eso adoptaron una drástica medida.
Para evitar cualquier contratiempo y sobre todo para protegerse de otro eventual ataque, Boca Juniors llevará a su plantel en un autobús blindado hasta el estadio Monumental, a donde volverán por primera vez desde que ocurrieron aquellos incidentes.
"Llevaron un auto al predio de Boca en Ezeiza (al sur) con los mismos vidrios blindados del bus y los jugadores le pegaron con una maza pero no se rompen", contó al diario Olé el chofer boquense Darío Ebertz.
Dario Ebertz es el chófer que el año pasado estaba al frente del bus que trasladaba al plantel de Boca Juniors: "Se rompe el vidrio de la parte de afuera, se astilla, pero para adentro no pasa nada. Tiene doble vidrio con una lámina de espesor muy gruesa en el medio".
Boca Juniors y River Plate se verán las caras este domingo por la quinta fecha de la Superliga Argentina. Los de azul y oro están punteros junto a San Lorenzo con 10 unidades y los del barrio porteño de Nuñez figuran quintos con 7 puntos.
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