Los hinchas alemanes celebraron el histórico triunfo 7-1 sobre Brasil en el mismísimo Estadio Mineirao de Belo Horizonte por la semifinal del Mundial.
Miles de alemanes celebraron el martes en las calles el histórico triunfo de su selección en Belo Horizonte y el pase a la final del Mundial de fútbol, a pesar de que la lluvia cayó con fuerza en buena parte del país.
Cientos de cohetes estallaron en la noche antes incluso de que acabara el encuentro, cuando Kedhira marcó el quinto gol de Alemania antes del descanso e hizo prácticamente irreversible la victoria.
"Gracias, os queremos" o "Este triunfo es para la eternidad" fueron los sucesivos titulares que eligió el diario sensacionalista "Bild" en su edición digital para narrar un partido que difícilmente olvidará Alemania.
Los periódicos nacionales volcaron toda su imaginación en internet y mientras Brasil lloraba su "humillación", el "Frankfurter Allgemeine" loaba "Las siete maravillas del fútbol" y el "Süddeutsche Zeitung" comparaba a su selección con la española: "Como Xavi e Iniesta juntos".
Decenas de miles de personas llenaron la zona acotada en el berlinés Tiergarten para ver la victoria en las pantallas gigantes colocadas frente a la emblemática Puerta de Brandeburgo, donde pronto dejaron de escucharse a los hinchas brasileños que se habían acercado al lugar.
Similares escenas se sucedieron en otras grandes ciudades del país, aunque la lluvia hizo que muchos aficionados eligieran hoy seguir el partido en sus casas o cobijados en los bares.
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