El presidente de EE.UU. se reencontró con los integrantes de los Heat de Miami.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, volvió a ser el anfitrión en la Casablanca de los Heat de Miami, que hicieron la tradicional visita a la residencia del mandatario como bicampeones de la NBA.
Obama felicitó a toda la comitiva de los Heat por su nuevo logro.
"Nadie puede cuestionar el corazón y la determinación necesaria que hicieron posible que el equipo volviese a estar en la cima de la liga", destacó Obama, declarado seguidor de la NBA, aunque ha reconocido que su equipo preferido son los Bulls de Chicago.
La nueva visita a la Casa Blanca de los Heat tiene que ver con la conquista del segundo título consecutivo de la NBA, el pasado junio, cuando en las finales ganaron la serie al mejor de siete partidos por 4-3 a los Spurs de San Antonio.
Durante la ceremonia en el Salón Este, Obama también elogió las acciones del equipo fuera del campo, en ayuda y apoyo a la comunidad.
Antes de llegar a la Casa Blanca, los jugadores, encabezados por sus estrella, el alero LeBron James y el escolta Dwyane Wade, visitaron a miembros del ejército heridos en un hospital militar, que se encuentra en el área de Washington.
Obama destacó que la acción era un ejemplo de la labor caritativa que los jugadores han llevado a cabo durante todo el año en distintos sectores de sus respectivas comunidades.
Toda la plantilla de los Heat también fue recibida y honrada en la Casa Blanca en enero del año pasado por el título obtenido en 2012, entonces el segundo de su historia.
EFE
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