Callao: Niño de 12 años escapa de albergue por temor a castigo

Un menor de 12 de edad huyó del albergue ‘La Sagrada Familia’ en Ventanilla, Callao, luego que su profesora lo amenazara con cortarle el cabello porque lo encontró peleando con otro compañero en la hora de recreo.

Ya son nueve días desde que el menor está desaparecido y su madre, Julia Carrión, ha emprendido una incansable búsqueda.

La mujer contó a RPP Noticias que hace nueve meses internó a su hijo Jason en el albergue, porque él faltaba al colegio para ir a trabajar y ayudarla con los gastos del hogar.

Este no sería el primer caso de niños que han escapado del refugio perteneciente a una asociación privada cristiana dirigida por Miguel Rodríguez Candia, y en la mayoría de los casos los menores retornaban a sus casas.

Se cree que eso fue lo que ocurrió con Jason, pues según personal del establecimiento, el niño fugó acompañado con su amigo Manuel. Este último apareció en su casa y contó que Jason iba ir en busca de su mamá porque ella le había dicho que haría un viaje de ida y vuelta.

La progenitora, por su parte, relató que efectivamente viajó a Huánuco del domingo al jueves y contó que su hijo se había puesto triste cuando supo que se ausentaría. "Él se puso triste y me dijo "mamá no te demores"", refirió.

Ella comentó que aún no ha podido conversar con Manuel porque, según ea han informado en el albergue, el niño ha viajado a Trujillo con su familia.

Al parecer, para salir del local Jason habría saltado por una pared muy alta y estaría cojeando. Cuando desapareció vestía un buzo azul con franjas blancas a los costados y sandalias, mide aproximadamente 1 metro 15, es de  contextura mediana y tez mestiza.

Ministerio de la Mujer y Policía ayudarán en la búsqueda

En comunicación con RPP Noticias, la ministra de la Mujer, Ana Jara Velásquez, pidió tranquilidad a la madre y le informó que en coordinación con la Policía Nacional buscarán al menor.

Asimismo, indicó que ha ordenado tanto al Inabif como a la Dirección de Investigación Tutelar, adscritos a su sector, verificar la situación económica de la progenitora, pero también el estado situacional emocional de todos los niños del alberque privado, "para evitar que situaciones como estas vuelvan a ocurrir".