La noche fue esplendida, no pudo estar mejor, así empezó el desfile de platos con un abre bocas. Esparragos bardados en prosciutto y queso campesino, con salsa holandesa, alcachofas rellenas bechamel, jamón gorgonzola, esparrago y parmesano.
Cada vez viene ganando más adeptos las cenas maridajes en los restaurantes cinco tenedores de Lima, y más aún cuando el eje temático de comida y vino, se armonizan bajo un determinado concepto. Esta vez España se presentó en el lujoso restaurante Eliazar , ubicado en pleno corazón de Miraflores.
La cena estuvo a cargo del chef Robert del Aguila Arista y los vinos fueron presentados por Panuts de Marisol Oliva. La noche fue esplendida, no pudo estar mejor, así empezó el desfile de platos con un abre bocas. Esparragos bardados en prosciutto y queso campesino, con salsa holandesa, alcachofas rellenas bechamel, jamón gorgonzola, esparrago y parmesano. Aquí el Raventos Blanc L Herau, -vino “vino espumoso” Brut, (Macabeu 45%, Xraello 25% y Parellada 20%) - armonizaba bien con la frescura de los espárragos y el queso campesino. La salsa bechamel no estuvo nada recarga.
En la entrada un Mero a la parilla, con limón y chives beurre blanc, tomatitos cherry, vainitas bebe y puré de alcachofa y crema, fue acompañado con Muga blanco (2010) fermentado en barrica (viura 90% y Malvasia 10%) , roble francés de primer uso. El matrimonio de sabores no pudo ensamblar mejor con la salsa preparada con mantequilla y vino blanco. El mero parecía haber llegado el mismo día del norte del norte del país, el pez había pasado la noche anterior durmiendo en un menjunje especial con ralladura de limón. La acidez del viura con el cítrico manejado delicadamente resaltaron las papilas gustativas de los comensales.
El plato de fondo. Ravioles de camote, loche, queso azul y crema al burro de salvia con tournedó en espejo de vino, se comprometió en una noche de pasión con (tinto fino 100% Finca Resalso). El camote con el loche fue cocinado al horno y un poco de azucar se convirtió en miel. El dulzor del loche y el camote, coqueteó al tinto fino redondo con toques de vainilla de la barrica.
La noche no terminaba, la música de flamenco del show con baile de una joven española, despertaba el apetito carnal. En la mesa se hizo presente Lomo de cerdo al sabor de manzana y damascos, rissoto funghi con setas y portobello, pastel de carne relleno al demigalse.
Se necesitaba un vino de choque, un vino con carácter para esta ocasión. Emilio Moro (Tinto fino) 2009 Reserva, hizo frente a la salsa demiglase que armonizaba con las setas y portobello. Los sabores ahumados de la barrica y el tinto equilibrado llevaron de la mano a las setas y el portobello.
El final de estocada, el postre. Blondie de vainilla y butterscotch (tofe) con helado al jengibre y aguaymanto. Poema Rose (Trepat 100%) un cava Brut , cepa autóctona de la denominación de origen Conca de Barberà. Su color a cereza y frutas rojas, pasaban elegantemente en boca junto a su acidez equilibrada. Los sabores dulces del tofe y el aguaymantose enamoraron a la acidez de la cereza.
Según afirma Mario Falcón , jefe de marketing de Eliazar del casino Atlantic City , los almuerzos ejecutivos por S/46.00 vienen teniendo notable éxito. Además hay noche de tango y flamenco. Reservas 705-4460, Av Benavides 430 Miraflores.
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