Glamour y exotismo convergen desde hoy en Río de Janeiro en una exposición con cincuenta trajes del célebre modisto francés.
Glamour y exotismo convergen desde hoy en Río de Janeiro en una exposición con cincuenta trajes del célebre modisto francés Yves Saint Laurent inspirados en los viajes "extraordinarios" que el diseñador hizo a otras culturas por medio de la literatura y el cine.
"A Saint Laurent nunca le gustó viajar", explicó a Efe el productor de la exposición, Christophe Coffrant, lo que no impidió que el creador plasmase influencias del continente africano, de la India, de Marruecos o de España en unos diseños que salen de Francia por primera vez para instalarse en Brasil.
La muestra, enmarcada dentro de los actos del Año de Francia en Brasil, servirá también para mantener viva la memoria de uno de los maestros de la alta costura cuando está a punto de cumplirse un año de su fallecimiento en París, el 1 de junio de 2008.
"No es solo una exposición de moda para especialistas, se trata de mostrar una Francia glamourosa a través de la fuerte personalidad de Yves Saint Laurent", apuntó Coffrant, para quien el modisto "es toda una leyenda de la cultura".
Los diseños exhibidos están acompañados por más de 240 accesorios entre brazaletes, collares, zapatos, sombreros o turbantes y pertenecen a alguna de sus colecciones de entre 1967 y 1999.
Agrupados en torno a seis espacios geográficos (África, Asia, España, India, Marruecos y Rusia), los vestidos y complementos reflejan a la perfección la particular forma en la que este "viajero inmóvil" recibió la influencia de todos estos lugares a lo largo de su trayectoria.
La exhibición pretende también incidir en la relación de Saint Laurent con otras formas de arte más allá de la moda a través de una banda sonora que incluye algunos de sus compositores favoritos, como Berlioz, Debussy o Ravel y una escenografía creada a partir de la paleta de colores más utilizada por el diseñador.
La muestra se completa con algunos croquis dibujados por el modisto y con una instalación móvil en la que cuelgan del techo varias reproducciones de gran tamaño de las tarjetas de felicitación de fin de año que durante cuatro décadas envió a sus amigos más íntimos y a sus clientes más especiales.
El proyecto de la exposición para celebrar el Año de Francia en Brasil fue aprobado por el propio Yves Saint Laurent tras una muestra similar realizada en el 2006 en la sede de la Fundación Pierre Bergé en París, encargada de mantener su patrimonio creativo.
"Junto con Channel y Dior, la figura de Saint Laurent es una de las más conocidas y respetadas en Brasil", explica el productor encargado de traer unas piezas "de enorme delicadeza" que tras su paso por Río de Janeiro volverán a ser preservadas en Francia.
Yves Saint Laurent, que creó su propia marca junto a su socio Pierre Bergé en 1961, fue uno de los grandes nombres de la moda a nivel internacional hasta su retirada en 2002 con un gran desfile de más de 300 modelos a modo de retrospectiva de sus 40 años de carrera.
-EFE-
"A Saint Laurent nunca le gustó viajar", explicó a Efe el productor de la exposición, Christophe Coffrant, lo que no impidió que el creador plasmase influencias del continente africano, de la India, de Marruecos o de España en unos diseños que salen de Francia por primera vez para instalarse en Brasil.
La muestra, enmarcada dentro de los actos del Año de Francia en Brasil, servirá también para mantener viva la memoria de uno de los maestros de la alta costura cuando está a punto de cumplirse un año de su fallecimiento en París, el 1 de junio de 2008.
"No es solo una exposición de moda para especialistas, se trata de mostrar una Francia glamourosa a través de la fuerte personalidad de Yves Saint Laurent", apuntó Coffrant, para quien el modisto "es toda una leyenda de la cultura".
Los diseños exhibidos están acompañados por más de 240 accesorios entre brazaletes, collares, zapatos, sombreros o turbantes y pertenecen a alguna de sus colecciones de entre 1967 y 1999.
Agrupados en torno a seis espacios geográficos (África, Asia, España, India, Marruecos y Rusia), los vestidos y complementos reflejan a la perfección la particular forma en la que este "viajero inmóvil" recibió la influencia de todos estos lugares a lo largo de su trayectoria.
La exhibición pretende también incidir en la relación de Saint Laurent con otras formas de arte más allá de la moda a través de una banda sonora que incluye algunos de sus compositores favoritos, como Berlioz, Debussy o Ravel y una escenografía creada a partir de la paleta de colores más utilizada por el diseñador.
La muestra se completa con algunos croquis dibujados por el modisto y con una instalación móvil en la que cuelgan del techo varias reproducciones de gran tamaño de las tarjetas de felicitación de fin de año que durante cuatro décadas envió a sus amigos más íntimos y a sus clientes más especiales.
El proyecto de la exposición para celebrar el Año de Francia en Brasil fue aprobado por el propio Yves Saint Laurent tras una muestra similar realizada en el 2006 en la sede de la Fundación Pierre Bergé en París, encargada de mantener su patrimonio creativo.
"Junto con Channel y Dior, la figura de Saint Laurent es una de las más conocidas y respetadas en Brasil", explica el productor encargado de traer unas piezas "de enorme delicadeza" que tras su paso por Río de Janeiro volverán a ser preservadas en Francia.
Yves Saint Laurent, que creó su propia marca junto a su socio Pierre Bergé en 1961, fue uno de los grandes nombres de la moda a nivel internacional hasta su retirada en 2002 con un gran desfile de más de 300 modelos a modo de retrospectiva de sus 40 años de carrera.
-EFE-
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