El restaurante de pescados y maricos ´El Huarike´ de Nicolás Giha, es un ejemplo de cómo lograr una diferenciación que va desde el concepto del local, hasta la elaboración y presentación de los platos.
Hay cebicherías como “cebiches” en Lima. Todos tiene su forma del preparar nuestro plato “emblema” , pero cada una de ellas diferenciadas por la sazón, esto es una de las cualidades que las hace distintas una de otras.
El restaurante de pescados y maricos “El Huarike” de Nicolás Giha, es un ejemplo de cómo lograr una diferenciación que va desde el concepto del local, hasta la elaboración y presentación de los platos.
Nicolás es administrador de profesión pero -“sibarita”- aficionado al buen comer, ahí nace su parte de su éxito.
Empezó hace más de siete años con su local de San Borja, muy bien ubicado, entre las avenidas San Borja Norte con Las Artes, en el local donde antes tenía la franquicia de la antigua cadena de pollerías Mediterraneo Chiken, y luego a los pocos años tras abrirse un espacio en el mundo gastronómico, abrió su segundo local en Enrique Palacios en Miraflores a pocos metros de la avenida Arequipa.
El local de Miraflores es amplio y ventilado, cuenta con una barra muy bien nutrida de licores donde puede encontrar un refrescante y bien preparado chilcano de pisco.
Entre los platos que destacan están: Atún con fetuccini al pesto, preparado con una base de ajo, mantequilla, leche y queso parmesano. Una salsa de origen italiano en su punto exacto, sin demasiada carga de condimento. El Chef Jose Luis Fernandez comenta que el secreto para que la albahaca no pierda color primero debe pasar por agua hirviendo con sal.
Otro de sus platos “estrella” es Corvina Crispy. Es una corvina empanizada al panko acompañada con una salsa de curry- con toque de Pisco- y arroz thai. Toda una exquisitez.
El Huarike también apoya la propuesta de la sostenibilidad de la cocina marina del Grupo Gastronómico, hace poco acaba de aparecer en la última edición de la revista Pez Gourmet.
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