En el programa Tema de Fondo, Rubén Vargas indicó que el crimen organizado en el país está alimentado por economías ilegales como el narcotráfico, trata de personas, contrabando, tala y minería ilegal".
Rubén Vargas Céspedes, exministro del Interior, realizó un análisis sobre el avance del sicariato en el Perú. Al respecto, afirmó que esta actividad delictiva es la cara visible de un problema mayor: el crimen organizado.
"El crimen organizado en el Perú está alimentado por las economías ilegales como el narcotráfico, trata de personas, contrabando, tala y minería ilegal", indicó Vargas Céspedes en una entrevista en el espacio Tema de Fondo de RPP Noticias.
Precisó, además, que el sicariato está relacionado también con el control territorial, debido a que los asesinos a sueldo son el brazo armado que utilizan los grupos criminales para enfrentarse a otras bandas o a la fuerza pública.
"Ahora mismo en Lima hay una guerra silenciosa por el control de las calles, ya sea para extorsionar a comerciantes formales o informales. Hay una guerra por cotrolar la trata de personas con fines de explotación sexual y para ello utilizan una gran violencia, con la que buscar sentar su hegemonía en las calles de la ciudad", sostuvo.
Rubén Vargas recomendó fortalecer los sistemas de inteligencia policial con el fin de frenar de manera efectiva el crecimiento del crimen organizado y como consecuencia el del sicariato.
"Tiene que haber una estrategia que pase necesariamente por fortalecer la inteligencia policial, tiene que haber un trabajo en equipo entre la policía especializada y la fiscalía como si fueran parte de una misma estructura", manifestó.
Por último, explicó que debe realizarse un trabajo articulado con el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) porque "los penales son la base de operaciones de las organizaciones criminales, son los lugares donde nacen los pedidos para que los sicarios ejecuten a sus víctimas".
Lima
El exministro dijo que los sicarios son el brazo armado que utilizan los grupos criminales para enfrentarse a otras bandas o a la fuerza pública.
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