Las actividades externas se suspendieron y solo el taller conocido como ´casa fuerza´ seguía con sus labores de soldadura y compresión de la basura.
El peor temporal en todo el verano austral. Tres grados bajo cero y más de cien kilómetros por hora de un congelado viento sorprendió a los treinta y dos expedicionarios que ya están haciendo las maniobras de repliegue.
La ensenada Mackellar sentía la furia de una tempestad y por primera vez en toda la temporada pudimos ver las olas del mar reventar contra la nieve, mientras que las blancas precipitaciones no daban tregua. Las únicas felices con esta extrema situación fueron las skuas pues este movimiento removía el krill y los peces del océano facilitando su captura.
“Nos había tratado demasiado bien la Antártida” decían los expedicionarios. “Este es el verdadero continente extremo”.
A pesar del mal tiempo, se realizó el respectivo izamiento del pabellón nacional y varios de los expedicionarios aprovecharon una baja del tiempo, conocida como “ventana” para salir a tomar fotografías.
Las actividades externas se suspendieron y solo el taller conocido como “casa fuerza” seguía con sus labores de soldadura y compresión de la basura.
Cuenta regresiva
Ya quedan pocos días para el regreso a Buenos Aires y hoy domingo se permitió por última vez la salida del zodiac a la estación científica brasilera “Comandante Ferraz” lo que hace posible el envío de esta nota.
El miércoles el buque argentino “Canal Beagle” recogerá al grupo y nos llevarán hasta la base chilena Frei conocida como el aeropuerto, donde tomaremos un avión de las fuerzas armadas argentinas para ser guiados hasta Buenos Aires donde permaneceremos dos días antes de la llegada a nuestra querida patria.
Cabe mencionar que, el día 25 de diciembre partieron hacia la Antártida un grupo de 32 personas, compuesto por miembros de las fuerzas armadas, científicos, ingenieros y una periodista.
En esta oportunidad la campaña antártica se ha realizado con apoyo logísitico de buques argentinos debido a que el BIC Humboldt se encuentra siendo reparado.
Los 32 expedicionarios, permanecen desde hace casi dos meses en la Base antártica peruana Macchu Picchu. Han realizado programas de investigación científica, estudios de impacto ambiental, levantamiento cartográfico, mantenimiento de nuestra actual base, labores destinadas para la construcción de la futura base permanente antártica peruana en el Continente Austral y para la elaboración del libro de las bodas de plata antártica del Perú, se reunirá material fotográfico así como cinematográfico donde opera nuestra estación antártica.
En la Antártida, que actualmente constituye el laboratorio científico más grande del mundo y que hasta la actualidad es un espacio de paz y cooperación internacional, participa el Perú desde el 26 de febrero de 1988.
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