También incluyen a su hijo Piersilvio y de otras nueve personas, por el delito de fraude fiscal relativo a las cuentas de la sociedad Redes Televisivas Italianas, controlada por Mediaset.
La Fiscalía de Roma pidió el envío a juicio del empresario y ex presidente del Gobierno italiano Silvio Berlusconi, de su hijo Piersilvio y de otras nueve personas, por el delito de fraude fiscal relativo a las cuentas de la sociedad Redes Televisivas Italianas (RTI), controlada por Mediaset.
Los medios de comunicación italianos informan de que los fiscales pidieron el enjuiciamiento al considerar que la sociedad televisiva, que presidía Pier Silvio Berlusconi, evadió 10 millones de euros mediante la emisión de facturas falsas por un valor de 220 millones en el periodo 2003-2004.
Además de para Berlusconi y su hijo, también se ha pedido el envío a juicio del productor estadounidense Frank Agrama; el dirigente de Mediaset Pasquale Cannatelli; de los directivos de RTIm Gabriella Ballabio, Daniele Lorenzano, Giorgio Dal Negro, Roberto Pace y Guido Barbieri, mientras que en la misma investigación se acusa de lavado de dinero a los chinos Paddy Chan y Catherine Hsu Chun.
Ahora el juez de la audiencia preliminar de Roma tendrá que pronunciarse sobre si acepta el enjuiciamiento.
Esta investigación deriva del proceso judicial por el caso Mediatrade, por el que Berlusconi estaba acusado de fraude fiscal y apropiación indebida, pero por el que finalmente no fue enjuiciado.
Mientras que sí se dictaminó el enjuiciamiento de otros nueve imputados, entre ellos el hijo del mandatario Piersilvio; el presidente del grupo televisivo Mediaset, Fedele Confalonieri, y el productor americano Frank Agrama y el mediador Daniele Lorenzano.
Los cargos relativos al supuesto fraude fiscal en Redes Televisivas Italianas, controlada por la sociedad Mediaset, propiedad de la familia Berlusconi, pasó a la competencia de la fiscalía de Roma, ya que ésta tenía sede en la capital italiana.
Si el juez decide enviar a juicio a Berlusconi, este se convertiría en el quinto proceso en el que el exmandatario se tiene que sentar en el banquillo de los acusados.
El pasado 7 de febrero fue enviado a juicio por la publicación de escuchas telefónicas de procedencia ilícita en el diario "Il Giornale", propiedad de su hermano Paolo.
En los otros está acusado de un delito de fraude fiscal en el conocido caso Mediaset; de un delito de corrupción en acto judicial en el caso Mills, y de inducción a la prostitución de menores y abuso de poder en el caso Ruby.
EFE
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