La cinta dirigida por argentino Damián Szifrón se llevó el premio Goya a la Mejor Película Iberoamericana y apunta al Oscar, para el cual tambiéne está nominado.
La gala de la XXIX edición de los Premios Goya, comenzó con un viaje musical al pasado y un monólogo en el que el presentador de la gala, Dani Rovira, le pidió al ministro de Cultura, José Ignacio Wert que pusiera "buena cara".
Szifrón recogió el Goya de manos de Cayetana Guillén Cuervo y Ernesto Alterio, y lo hizo acompañado de Pedro y Agustín Almodóvar y Esther García, de la productora El Deseo, coproductora de la película y representantes de la argentina Kramer & Sigman Films.
"Es una gran placer estar acá por este premio y por las nueve nominaciones. Estamos muy orgullosos", afirmó el director, que dio las gracias a "los mejores productores posibles", que le han impulsado a trabajar al mejor nivel.
Y dedicó el premio al "extraordinario elenco" de la película, a sus padres, a su mujer y a sus dos hijas.
Por su parte, Agustín Almodóvar quiso dar las gracias a la Academia española por haberles tratado como "una película cien por cien española".
Nominada también al Óscar a mejor película de habla no inglesa, "Relatos salvajes" está compuesta de seis historias independientes pero con un punto en común: la reacción extremas que cualquier persona puede tener frente a una situación cotidiana. EFE
Comparte esta noticia