Sobre suboficial de las Águilas Negras, involucrado en la muerte de Wilhem Calero, pesa una queja en la Defensoría del pueblo por atentar contra la vida, según diario.
Uno de los agentes de las Águilas Negras, que el pasado 14 de julio, involucrado en la muerte por asfixia contra al ingeniero Wilhem Calero Coronel, tras una violenta intervención policial en el distrito de San Miguel, presenta antecedentes por un caso de abuso similar, informa la prensa local.
De los siete efectivos involucrados, Carlos Candia Cartolín, sindicado como quien encabezó la golpiza contra la víctima, había sido reincorporado al cuerpo policial hace cuatro meses debido a que fue sancionado el 2009.
Según el diario Perú 21, no se sabe si en aquella oportunidad el policía causó la muerte o lesiones, pero confirma que sobre el suboficial pesa una queja en la Defensoría del Pueblo por atentar contra la vida de una persona.
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Asimismo, refiere que Candia Cartolín sería primo del guardaespaldas personal de un alto funcionario del Ministerio del Interior.
El fatídico 14 de julio pasado, Wilhem Calero acudió hasta un cajero, ubicado en la avenida Faucett en San Miguel, para retirar 50 soles. La víctima pidió auxilio a dos efectivos que resguardaban la entidad bancaria al indicar que unos "marcas" lo seguían.
Calero fue confundido con un delincuente. La familia denuncia que a los agentes de las Águilas Negras "se les pasó la mano" con el ingeniero, ya que lo golpearon y lo torturaron.
En la víspera, el ministro del Interior, Octavio Salazar, reconoció que hubo un "exceso" de parte del personal de las Águilas Negras, y que lo ocurrido era "indignante".
Asimismo, informó que el ingeniero murió al interior de un patrullero.
"Lo real es que ha muerto una persona producto de un exceso al interior de una patrulla. La ley es la ley y tendrá que ser para todos", sentenció.
De los siete efectivos involucrados, Carlos Candia Cartolín, sindicado como quien encabezó la golpiza contra la víctima, había sido reincorporado al cuerpo policial hace cuatro meses debido a que fue sancionado el 2009.
Según el diario Perú 21, no se sabe si en aquella oportunidad el policía causó la muerte o lesiones, pero confirma que sobre el suboficial pesa una queja en la Defensoría del Pueblo por atentar contra la vida de una persona.
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Asimismo, refiere que Candia Cartolín sería primo del guardaespaldas personal de un alto funcionario del Ministerio del Interior.
El fatídico 14 de julio pasado, Wilhem Calero acudió hasta un cajero, ubicado en la avenida Faucett en San Miguel, para retirar 50 soles. La víctima pidió auxilio a dos efectivos que resguardaban la entidad bancaria al indicar que unos "marcas" lo seguían.
Calero fue confundido con un delincuente. La familia denuncia que a los agentes de las Águilas Negras "se les pasó la mano" con el ingeniero, ya que lo golpearon y lo torturaron.
En la víspera, el ministro del Interior, Octavio Salazar, reconoció que hubo un "exceso" de parte del personal de las Águilas Negras, y que lo ocurrido era "indignante".
Asimismo, informó que el ingeniero murió al interior de un patrullero.
"Lo real es que ha muerto una persona producto de un exceso al interior de una patrulla. La ley es la ley y tendrá que ser para todos", sentenció.
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