Joe Rodríguez promueve cultura y educación a través de la música

Para los sueños no hay límites. Joe Rodríguez, fundador y director la Asociación Cultural Arpegio, demuestra que es posible llevar educación integral a través de la música. Una muestra de ello son los 750 chicos de Trujillo y Chimbote que integran la melodiosa Orquesta de Barro.

El proyecto que creó en el 2003, contribuye a promover la cultura musical en nuestro país. Gracias a sus esfuerzos niños y jóvenes entre 5 y 18 años reciben clases gratuitas para aprender a tocar música clásica.     

Este año, el incansable músico trujillano, ganador del Premio Integración 2005, implementó el programa Ruta Sinfónica. Mediante la realización y puesta en escena de conciertos sinfónicos busca llevar cultura a los chicos de diferentes lugares de Trujillo. Además logró implementar coros en dos colegios del distrito de La Esperanza, donde un profesor acude dos veces por semana para impartir los conocimientos necesarios.

La constancia y esfuerzo de Joe fusionada con la ganas de aprender de los jóvenes han hecho posible que realicen cosas que jamás pensaron, como el viaje a Alemania que realizaron en el 2010 para tocar en el Teatro Sinfónico de Berlín. Una parte importante en la formación de los jóvenes es la participación de los 10 voluntarios alemanes que cada año vienen para enseñar y compartir sus técnicas. 

Gracias a los conocimientos y experiencia adquirida, 10 de los chicos que formaban parte de la orquesta se desempeñan como profesores en el proyecto y en la Orquesta Sinfónica de Trujillo. La labor de Joe apunta a que los jóvenes se desarrollen y potencien diversas capacidades, “quiero que a través de la música conozcan y se informen de otras cosas, que sean  chicos integrales que sepan de todo un poco”, indica.

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