´La Marcha de la Paz´, acción organizada por la oposición rusa, arrancó en la emblemática plaza Pushkin, donde muchos de los manifestantes se congregaron con banderas ucranianas, pero también rusas.
Decenas de miles de personas se manifestaron este domingo en el centro de Moscú contra la guerra en la vecina Ucrania y, en particular, contra el apoyo del Kremlin a los rebeldes prorrusos.
"La Marcha de la Paz", acción organizada por la oposición extraparlamentaria más crítica con el Kremlin, arrancó en la emblemática plaza Pushkin, donde muchos de los manifestantes se congregaron con banderas ucranianas, pero también rusas.
"Putin, basta de mentir y de hacer la guerra", es uno de los eslóganes de la marcha, según Alexandr Riklin, dirigente del movimiento opositor Solidaridad.
Los organizadores exigen al presidente ruso, Vladímir Putin, que deje de apoyar a los insurgentes, que ordene el repliegue de las tropas de Ucrania e incoe casos penales contra aquellos que obligaron a soldados rusos a combatir en territorio extranjero.
La multitudinaria marcha tiene como fin la avenida Sájarov, símbolo de las protestas antigubernamentales contra el fraude electoral de finales de 2011.
"Las manos fuera de Ucrania", "No a la guerra" o "Fuera las tropas rusas de Ucrania" son otros de los lemas que pueden leerse en las numerosas pancartas que fueron revisadas una por una por las fuerzas del orden, algo nunca visto antes en este país, según el diario Gazeta.ru.
Algunas pancartas caseras que incluían lemas contra Putin, como el ya clásico "Rusia sin Putin" o "Putin Kaput", fueron incautadas por la policía.
El Ayuntamiento advirtió de que, en virtud de la polémica ley sobre manifestaciones políticas, los organizadores serán castigados administrativamente si los eslóganes o pancartas en la marcha se contradicen con la solicitud presentada.
BORÍS NEMTSOV, PRINCIPAL ORGANIZADOR
"El Partido de la Guerra dirige el país con Putin a la cabeza", aseguró Borís Nemtsov, principal organizador de la marcha y uno de los mayores críticos del jefe del Kremlin.
Nemtsov opina que, pese al memorándum de paz firmado el sábado en Minsk entre el Gobierno ucraniano y los rebeldes prorrusos, la amenaza de la guerra en el país vecino está aún muy presente.
"La tregua en Ucrania es frágil. ¿Por qué? A (el presidente ruso, Vladímir) Putin no le conviene, ya que quería crear Novorrosía desde Donetsk y Lugansk hasta Odessa, unirlo con Transnistria y obtener un corredor hasta Crimea", proclamó.
La oposición extraparlamentaria rusa ha denunciado en las últimas semanas la muerte de soldados rusos en territorio ucraniano, aunque el Kremlin ha negado insistentemente el despliegue de tropas regulares en el vecino país.
Además de partidarios, en la plaza Pushkin también se personaron partidarios de los insurgentes ucranianos con banderas separatistas, como los miembros del proscrito Partido Nacional Bolchevique, quien envió voluntarios a Donetsk y Lugansk a combatir contra las fuerzas ucranianas.
A lo largo de la marcha, algunos grupos radicales lanzaron huevos, tomates e incluso botas contra los manifestantes, a lo que estos respondieron solo de viva voz.
Además, en una fachada de un edificio colindante con la plaza alguien colgó una gigantesca pancarta con el lema "Marcha de Traidores" con la bandera de Estados Unidos de fondo.
Recientemente, Putin tachó de "traidores" a aquellos políticos y activistas rusos que se niegan a defender los intereses nacionales, en referencia a la defensa de la población rusohablante del este de Ucrania.
Miles de personas también asistieron a la "Marcha de la Paz" en San Petersburgo, patria chica del jefe del Kremlin, mientras en otras ciudades rusas, en algunos casos debido a la falta de autorización oficial, participaron solo unos pocos centenares.
Las ciudades orientales ucranianas de Járkov y Dniepropetrovsk, limítrofes con la zona del conflicto, también emularon las marchas rusas.
EFE
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