"Pedimos a EEUU que deje sus prejuicios políticos, le den importancia adecuada al desarrollo de China e inmediatamente rectifiquen sus ofensas", instó el gigante de Asia.
Pekín acusó hoy a EEUU de tener "prejuicios" sobre la masacre de Tiananmen tras las declaraciones realizadas por la portavoz estadounidense Jen Psaki en las que pedía a China que reabriera este trágico capítulo de su historia, del que se cumplen 24 años este martes, 4 de junio.
"Instamos a EEUU que deje atrás sus prejuicios políticos, le den la importancia adecuada al desarrollo de China e inmediatamente rectifiquen sus ofensas", instó en un breve comunicado el portavoz chino de Asuntos Exteriores, Hong Lei, del que se hacen eco hoy diversos medios del país asiático.
La portavoz estadounidense, Jen Psaki, pidió ayer a Pekín que "ponga fin al acoso" sobre aquellos que se manifestaron durante la matanza de Tiananmen, a pocos días del vigésimo cuarto aniversario de la masacre, y que rinda cuentas "plenamente" por los muertos, detenidos y desaparecidos entonces.
Lejos de reabrir cualquier tipo de investigación sobre lo ocurrido, Hong defendió que China ya "había sacado una conclusión clara" de la masacre y consideró que EEUU está interfiriendo en los asuntos internos del país, un "sabotaje" a la relación entre ambas potencias mundiales.
El portavoz chino incidió en destacar los logros conseguidos estos últimos años, en relación al crecimiento económico de la potencia, pero también "democrático".
"Todos los ciudadanos chinos disfrutan de amplios derechos y libertades", destacó en el breve comunicado emitido esta noche.
Esta es la continua respuesta oficial del Gobierno chino a cualquier pregunta relacionada con la matanza de Tiananmen ocurrida la noche del 3 al 4 de junio de 1989, de la que 24 años después se desconoce aún el número real de víctimas y por la que asociaciones como las Madres de Tiananmen siguen luchando por conocer la verdad de lo ocurrido.
Durante estos días, el control y la censura ya se sienten en la capital a través de internet o a pie de calle con detenciones de decenas de activistas para evitar, como todos los años cuando se aproxima el citado aniversario, que se produzca una protesta.
Este martes, no obstante, será un aniversario diferente al ser el primero bajo el liderazgo del presidente Xi Jinping, a quien organizaciones de derechos humanos y las Madres de Tiananmen ya han criticado por ser un "falso" reformista y por no levantar el "tabú" que pesa sobre esta tragedia.
EFE
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