El actor estadounidense se pondrá a las órdenes del director Paolo Sorrentino en la cinta ´´This must be the Place´.
Sean Penn dará vida a un rockero retirado en busca de venganza en el nuevo filme del cineasta italiano Paolo Sorrentino, "This must be the Place", una historia "europea" que el director de "Il Divo" (2008) comenzará a rodar, en breve, en Estados Unidos.
Así lo explicó el director, en conexión desde Nueva York, en una rueda de prensa celebrada hoy en Milán (norte de Italia) para presentar la película, una producción de 28 millones de dólares (22,2 millones euros) de presupuesto, que se proyectará en los cines en 2011 y que pretende llegar "a los corazones" del público.
"La idea es hacer un filme sencillo y lineal sobre un asunto también sencillo con el trasfondo de un asunto de una enorme dificultad", explicó Sorrentino en conexión desde la "Gran Manzana", en declaraciones que recogen los medios italianos.
La película, que coprotagoniza la actriz estadounidense Frances McDormand, narra la historia de Cheyenne, un rockero retirado obsesionado con encontrar al criminal nazi que atormentó a su padre en el campo de concentración de Auschwitz y que en la actualidad vive en Estados Unidos.
"Es una historia europea que se mueve sobre tres andenes. De una parte lo íntimo, por otra, la búsqueda de la paz contra el horror nazi y, luego, la ironía de una comedia", dijo Sorrentino de "This must be the Place", en la que también será tema central la escasa relación entre un padre y un hijo y el holocausto judío.
El cineasta italiano explicó que espera que ese toque de comedia lo aporte el mismo personaje de Cheyenne, interpretado por Penn, y que la idea de contar con el actor estadounidense para la película surgió en el Festival de Cannes de 2008, donde ambos coincidieron.
La película está producida, entre otros, por Medusa, la productora de Silvio Berlusconi, y cuenta con financiación del grupo bancario Intesa Sanpaolo, cuyo consejero delegado Corrado Passera estuvo hoy en la presentación.
"Este proyecto tiene todos los números para ser una historia de éxito. Podría ser la primera de una serie de intervenciones y, sobre todo, un ejemplo para que otros posibles inversores externos al cine puedan decidirse a apoyar esta industria", comentó Passera.
El presidente de Medusa, Carlo Rossella, destacó el carácter histórico que tiene la participación de un banco como Intesa Sanpaolo en la producción de la película.
"Es la primera vez que un banco entra en sociedad para realizar una película. Si a esto le siguen otros, será un revolución para el cine italiano", apuntó Rossella.
EFE
Así lo explicó el director, en conexión desde Nueva York, en una rueda de prensa celebrada hoy en Milán (norte de Italia) para presentar la película, una producción de 28 millones de dólares (22,2 millones euros) de presupuesto, que se proyectará en los cines en 2011 y que pretende llegar "a los corazones" del público.
"La idea es hacer un filme sencillo y lineal sobre un asunto también sencillo con el trasfondo de un asunto de una enorme dificultad", explicó Sorrentino en conexión desde la "Gran Manzana", en declaraciones que recogen los medios italianos.
La película, que coprotagoniza la actriz estadounidense Frances McDormand, narra la historia de Cheyenne, un rockero retirado obsesionado con encontrar al criminal nazi que atormentó a su padre en el campo de concentración de Auschwitz y que en la actualidad vive en Estados Unidos.
"Es una historia europea que se mueve sobre tres andenes. De una parte lo íntimo, por otra, la búsqueda de la paz contra el horror nazi y, luego, la ironía de una comedia", dijo Sorrentino de "This must be the Place", en la que también será tema central la escasa relación entre un padre y un hijo y el holocausto judío.
El cineasta italiano explicó que espera que ese toque de comedia lo aporte el mismo personaje de Cheyenne, interpretado por Penn, y que la idea de contar con el actor estadounidense para la película surgió en el Festival de Cannes de 2008, donde ambos coincidieron.
La película está producida, entre otros, por Medusa, la productora de Silvio Berlusconi, y cuenta con financiación del grupo bancario Intesa Sanpaolo, cuyo consejero delegado Corrado Passera estuvo hoy en la presentación.
"Este proyecto tiene todos los números para ser una historia de éxito. Podría ser la primera de una serie de intervenciones y, sobre todo, un ejemplo para que otros posibles inversores externos al cine puedan decidirse a apoyar esta industria", comentó Passera.
El presidente de Medusa, Carlo Rossella, destacó el carácter histórico que tiene la participación de un banco como Intesa Sanpaolo en la producción de la película.
"Es la primera vez que un banco entra en sociedad para realizar una película. Si a esto le siguen otros, será un revolución para el cine italiano", apuntó Rossella.
EFE
Comparte esta noticia