Siria: 170 yihadistas muertos por ataques de la coalición

Al menos 170 miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI) han muerto en las últimas 48 horas por bombardeos de la coalición internacional, liderada por EEUU, y los ataques de los kurdos en la provincia de Al Hasaka, en el noreste de Siria, informó este martes a Efe un responsable kurdo.

"Entre 170 y 200 integrantes del EI han fallecido por los bombardeos de la coalición y por la acción de las fuerzas kurdas y milicias cristianas sobre el terreno", dijo en declaraciones por teléfono Naser Hach Mansur, el portavoz del departamento de Defensa de la región autónoma kurdo siria de Al Yazira, donde se ubica Al Hasaka.

No obstante, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos destacó que la mayoría de los yihadistas perecieron por los ataques aéreos, porque los efectivos kurdos se han dedicado a "peinar" el territorio tras esos bombardeos.

El Pentágono estadounidense, que suele ofrecer cifras de bajas, no ha confirmado por el momento estos datos.

Mansur precisó que los ataques se han registrado en la periferia de la localidad de Tel Tamr, donde el EI se enfrenta a las Unidades de Protección del Pueblo -milicias kurdo sirias- y sus aliados desde finales de febrero.

Los kurdos han logrado avanzar y tomaron el martes el control del pueblo de Garra, al sur de Tel Tamr.

Mansur agregó que en estos momentos hay todavía unas doce aldeas en manos de los yihadistas en la periferia meridional de Tel Tamr, que están cercadas por las Unidades de Protección del Pueblo.

El EI inició una ofensiva a finales de febrero contra esa zona, tras ser derrotado el mes anterior por las fuerzas kurdas en el enclave de Kobani, en la provincia de Alepo.

Al comienzo de su asalto, el EI secuestró a más de dos centenares de personas en localidades de mayoría asiria, un grupo étnico cristiano, en Al Hasaka.

Mansur señaló que, según los datos de que dispone, habría entre 240 y 250 rehenes, y que las negociaciones entre las autoridades eclesiásticas y los yihadistas están suspendidas.

Según fuentes cristianas, el EI ha pedido 23 millones de dólares por la puesta en libertad de los asirios, lo que ha motivado la interrupción de las conversaciones, porque la Iglesia asiria del Este considera que esa cantidad es excesiva.

El responsable kurdo agregó que, hasta ahora, el EI mantenía a los secuestrados en la población de Al Shadadi, uno de los bastiones en Al Hasaka, pero que podría haberlos trasladado a un lugar desconocido.

EFE

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