Embarcación de más de 60 metros de eslora tenía ocho tripulantes que fueron rescatados por las fuerzas aéreas griegas. Nave llevaba el nombre de Yogi.
Un superyate de 60,20 metros de eslora, bautizado como Yogi, naufragó a unas 20 millas de la isla griega de Skyros, donde se hundió; mientras sus ocho tripulantes fueron rescatados por las fuerzas aéreas griegas.
Según ha trascendido el propietario de la nave sería de nacionalidad de francesa y fue su capitán Jean Louis Carrel, quien realizó la llamada de emergencia cuando el barco se hundía en medio de un temporal de fuerza 8 (entre 34 y 40 nudos de viento).
Las fuerzas aéreas griegas acudieron a socorrer a la tripulación en un helicóptero, pudiendo realizar la operación de rescate con éxito a pesar del mal tiempo.
El responsable del astillero, Mehmet Karabeyoglu, refirió que todo apunta a una avería en el escape de uno de los motores y a una posterior pérdida de potencia. Sin embargo, las causas del naufragio aún son materia de investigación.
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