Entre los fallecidos, supuestamente aplastados por el peso de la carga que transportaba el tren, se encuentran dos niños de 2 y 5 años y una mujer embarazada.
El número de víctimas por el descarrilamiento de un tren en el estado brasileño de Sao Paulo se elevó a ocho, después de que los bomberos hallaran esta madrugada otros dos cadáveres entre los escombros, informaron fuentes oficiales.
El accidente ocurrió por causas aún desconocidas en la noche del domingo en Jardín Conceicao, un humilde barrio en el centro de Sao José do Río Preto, municipio a unos 438 kilómetros de la ciudad de Sao Paulo.
Nueve vagones del tren, que transportaba una carga de maíz, se salieron de la vía y embistieron cuatro viviendas que quedaron completamente destruidas y en donde estaban las víctimas, entre los fallecidos hay dos niños de 2 y 5 años y una mujer embarazada.
Además de los fallecidos, la mayoría de los cuales murió sepultado cuando participaban en un asado en una de las viviendas, otras seis personas fueron conducidas con heridas a hospitales vecinos, dos de ellas en estado grave.
La operadora América Latina Logística (ALL), concesionaria del ferrocarril, divulgó una nota en la que lamentó el accidente y prometió toda la asistencia a las víctimas y sus familiares.
"Las causas del accidente serán investigadas en un proceso administrativo", agrego la empresa, cuyos portavoces desmintieron que el tren circulara a más de 40 kilómetros por hora, la velocidad máxima permitida en áreas urbanas.
La ALL agregó que la velocidad del tren es controlada por satélite, lo que evita que los maquinistas puedan violar las limitaciones.
En 2002 se registraron otros dos descarrilamientos en Sao José do Río Preto pero sin víctimas y en 2009 la operadora fue multada por incumplir un acuerdo en el que se comprometió a adoptar medidas para evitar este tipo de accidentes en su ferrocarril.
EFE
Comparte esta noticia