La llegada del invierno a Medio Oriente no ha hecho si no recrudecer la situación de los niños afectados por los enfrentamientos que atraviesa ese país.
En un nuevo llamamiento para recaudar donativos antes de Navidad, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en Alemania recordó que un total de 5.5 millones de niños se han visto afectados por la guerra civil en Siria.
La llegada del invierno a Medio Oriente no ha hecho si no recrudecer la situación de los niños afectados por los enfrentamientos que atraviesa el país.
Daniela Schadt, auspiciadora de Unicef en Alemania y pareja del presidente federal de Alemania, Joachim Gauck, hizo un llamamiento a la solidaridad por las víctimas más jóvenes de la guerra civil, calificada por Unicef como "la mayor crisis humanitaria de nuestros días".
"Junto con la guerra, la huida y la pobreza se suman ahora el frío y la humedad", afirmó Schadt en Berlín poco antes de las fiestas navideñas.
Unicef tiene muchas más dificultades para recaudar donaciones a favor de Siria que para hacer frente a una catástrofe natural como la ocurrida recientemente en Filipinas.
En dos años, la organización internacional recibió cinco millones de euros, frente a los 15 millones de euros recaudados en menos de una semana para ayudar a las víctimas del tifón en Filipinas.
"Ningún niño puede elegir las circunstancias ni la región en las que ha nacido", indicó la primera dama alemana sobre un país donde el 60 por ciento de los hospitales y el 30 por ciento de los centros de salud han sido destrozados.
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