La crecida del Rimac amenaza con desbordarse. Los vecinos aseguran que las obras inconclusas desvían peligrosamente las piedras arrastradas por el huaico.
El río Rímac amenaza con inundar zonas industriales y urbanas ubicadas a la altura del kilómetro 17 de la Carretera Central, en Ñaña. Los vecinos denuncian que las estructuras de una obra, supuestamente abandonada por la concesionaria de Odebrecht, Rutas de Lima, facilitan el paso de piedras y lodo que arrastra el caudal.
Se trata de las obras inconclusas de la ampliación de la autopista Ramiro Prialé, que proyecta unir a Huachipa con Chosica. La entrega de la nueva obra, anunciada en julio del 2016 por el alcalde Luis Castañeda (con el nombre de Nueva Autopista Central), estaba programada para diciembre del 2017.
La caída de huaicos de este viernes y la consecuente crecida del caudal del Rímac, ha puesto en riesgo a fábricas de leche, cervecerías y varios centros poblados, en ese sector Chosica. Los poblares piden la inmediata intervención de las autoridades.
Zonas afectadas. El río Rímac aumentó su caudal y se desbordó la madrugada de este viernes. Las principales zonas afectadas son Chosica, San Juan de Lurigancho y Huachipa. Los equipos de la Policía Nacional continúan en los diferentes puntos de emergencia para evacuar a los ciudadanos.
La situación es similar en Chaclacayo, donde los vecinos temen la caída de los puentes Morón y Los Ángeles. Esto, tras el colapso de parte de la vía del ferrocarril central como consecuencia de la erosión y el debilitamiento de su base.
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