A raíz de la suspensión de los peajes en Villa y Punta Negra, Rutas de Lima dijo que ha perdido la totalidad de sus ingresos y consumido aceleradamente sus reservas.
El concesionario Rutas de Lima (RDL) estimó que dejaría de operar desde el martes, 2 de diciembre, después de que se agotaran sus reservas de caja por las decisiones judiciales que suspendieron el cobro de peaje en las garitas de Villa y Punta Negra, en la Panamericana Sur.
A través de un comunicado, RDL señaló que la suspensión del cobro de peajes en estas dos estaciones hizo que la empresa pierda prácticamente la totalidad de sus ingresos y consuma aceleradamente sus reservas de caja operativa.
“El 11 de noviembre, RDL anunció que, sin los ingresos de peaje, se vería obligada a dejar de operar la concesión en un plazo de tres semanas. El día 2 de diciembre se cumple el plazo anunciado y en esa fecha tendría que dejar de operar”, se lee en la misiva.
Asimismo, Rutas de Lima indicó que el coste total de la concesión es de más de 25 millones mensuales, distribuidos entre el pago a más de 600 empleados, gastos de operación y mantenimiento; así como el recojo mensual de toneladas de basura, la operación de semáforos, la atención de emergencias viales, entre otras acciones.
Así, la empresa, responsable de varios tramos en la Panamericana Norte y Sur, dijo que no está abandonando la operación. Pero enfatizó que le es imposible seguir operando sin ingresos ni caja.