Para mejorar el transporte urbano, aún hace falta que el “sistema eficiente” del Metro, Metropolitano y corredores tenga capacidad para atender a más ciudadanos.
Solo 13% de limeños usan el actual sistema de transporte eficiente durante su recorrido hacia el trabajo o centro de estudios, según la última encuesta del Observatorio Ciudadano Lima Cómo Vamos. Esta red incluye el Metro de Lima, Metropolitano y los corredores complementarios. Otros modos de viaje, como el bus (42%) y la combi (38%), aún son los más utilizados por los usuarios.
Para Mariana Alegre, directora ejecutiva de Lima Cómo Vamos, el poco uso del “sistema de transporte eficiente” se debe a que aún carece de cobertura en la ciudad. “Estos vehículos de transporte público masivo no ofrecen las rutas adecuadas para trasladar toda la demanda”, afirma.
“Es un problema de en qué inviertes. El sistema integrado debe empezar por hacer más proyectos un poco más económicos como el Metropolitano, en lugar de invertir mucho dinero en un transporte como el Metro”, afirma Juan Tapia, presidente de CIDATT. El experto asegura que con la inversión que se destina a un kilómetro de la Línea del Metro se pueden construir 27 kilómetros de vías como el Metropolitano.
El informe país elaborado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) señala que esta red de transporte no está integrada debido a la inadecuada coordinación entre el gobierno central y los gobiernos locales. Por ejemplo, las líneas del Metro de Lima no han sido proyectadas con los planes municipales de transporte, señala el informe.
Al no contar con mayor capacidad, ni con un sistema de cobro y traslado integrado entre unidades y líneas, es poco probable que más ciudadanos migren del transporte tradicional al eficiente, señala Lima Como Vamos. Para los expertos, con rapidez y calidad se puede sustituir el uso de auto particular y transporte informal.
Según Lino de la Barrera, especialista en transporte, la movilidad en la ciudad no cuenta con una estrategia clara debido a la falta de planeamiento. “Sin un plan único de transporte para Lima, que se respete aún cuando cambian las autoridades”, sostiene.
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