Policía busca a presunto asesino de niña en cerros de Independencia y San Juan de Lurigancho

La Policía y vecinos de Payet en Independencia buscan desde la noche del martes en los cerros de la zona al adolescente y presunto asesino de la niña de cuatro años cuyo cadáver fue hallado el último domingo en el sector conocido como La Mina.

El operativo de búsqueda se montó luego de una alerta de vecinos, quienes aseguraron haber visto al presunto homicida en una casa del asentamiento humano Bellavista 2, a la que habría regresado para abastecerse de ropa y alimentos.

La Policía movilizó a unos 250 efectivos de varias comisarías de Lima Norte y contó con el apoyo de un helicóptero durante la búsqueda, que se prolongó hasta la madrugada y se retomó a las seis de la mañana de este miércoles.

La policía perdió el rastro del adolescente en los cerros donde limitan los distritos de Independencia y San Juan de Lurigancho, zona donde se refugiaría el presunto asesino.

El comandante de la Policía, Wilber Torres, comisario de Payet, dijo a RPP que el menor estaría vinculado a traficantes de terrenos, quienes lo estarían protegiendo. El adolescente se estaría moviendo en áreas que están en control de estos grupos. La policía y vecinos descubrieron zonas lotizadas durante la búsqueda.

"(El adolescente) sacó ventaja porque la información llegó tarde, sin embargo, sabemos cuáles son los lugares en los que se mueve. Es cuestión de horas, Dios lo permita, su captura", dijo el oficial.

El operativo de esta mañana es dirigido por el mayor Moisés Valverde, jefe de operaciones de la comisaría de Payet. La Policía también ha desplegado efectivos en varios asentamientos humanos de la zona. 

Juan Burga, un vecino que ayuda a la Policía en la búsqueda, dijo a RPP Noticias que luego de haber peinado la cima del cerro La Mina sin dar con el presunto asesino, este podría haber huido hacia Collique en Comas o a Canto Grande o Bayovar en San Juan de Lurigancho, zonas que conectan con ese sector de Independencia.  

Además, conjeturó, que si el adolescente tiene la complicidad de su familia ya abandonó la zona, de lo contrario aún se ocultaría entre los cerros y estaría en situación vulnerable por falta de recursos económicos para alimentarse.