La heredera de la WWE tomó venganza de su esposo y golpeó en repetidas ocasiones a Roman Reigns. No lo despidió, pero le lanzó tremenda amenaza.
Stephanie McMahon fue la espectadora de la masacre de Triple H a manos de Roman Reigns en TLC 2015. La heredera de la WWE no aguantó la ira y se descargó en el rostro del samoano al tirarle cachetadas una y otra vez en la noche del Raw.
Roman Reigns interrumpió a Stephanie McMahon mientras esta daba un discurso en el que amenazaba su permanencia en la WWE. Una vez en el ring, ella aprovechó para sacarle en cara el grave error que había cometido. "No creo que sea buena idea golpear a tu jefe, a quien te paga el sueldo", dijo.
Sin embargo, la discusión no duró mucho. Stephanie McMahon se descontroló y cacheteó una y otra vez en represalia al ataque a su esposo. No contenta con ello, le reveló que su destino en la WWE no dependería ni de ella ni de Triple H, sino de Vince McMahon ¿Qué decidirá el magnate?
Comparte esta noticia