Por: Eduardo Rondón Navas, médico veterinario. Es necesario saber que para tener a nuestra nueva mascota es importante que puede ser un monito, loro o cualquier animal silvestre que no pertenezca a este hábitat.
Por: Eduardo Rondón Navas, médico veterinario
Muchas enfermedades de los hombres son transmitidas por los animales, lo cual es conocido como zoonosis. En estos momentos estamos viendo la COVD-19, que posiblemente muto de murciélago a hombre y se produjo la pandemia.
El mayor predador de la naturaleza es el Homo Sapiens: el hombre, que desalojó a los grandes predadores como leones, felinos salvajes, etc. al descubrir el fuego y los primeros utensilios que usó como armas. Comenzó a depredar quemando bosques para poder comer carne y frutos cocidos que luego cosechaba y así “evolucionamos” hasta llegar a nuestros días y continuar con el afán destructivo a mayor escala.
Tener animales en circos, zoológicos o tener animales silvestres como mascotas es lo peor que se puede hacer. Es necesario saber que para tener a nuestra nueva “mascota”- que puede ser un monito, loro, o cualquier animal silvestre que no pertenezca a este hábitat- hemos tenido que aceptar que un cazador, en el caso de un monito, debió tirar perdigones a toda la manada, matando o dejando heridos a otros. Los monitos están prendidos del cuello de sus madres, aterrados y el cazador debe arrancar al monito de los brazos de su madre y colgárselo en su brazo. El monito se cuelga del cazador por sentir calor y pensar que está siendo protegido sin entender que se trata de su verdugo. Además, debemos considerar que estos animalitos traen muchísimas enfermedades transmisibles al ser humano.
La única forma de romper con esta crueldad es no comprar estos animalitos pues el vendedor buscara más sabiendo que alguien lo comprará por pena.
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