El popular golfista norteamericano tiene paradero desconocido, pues luego de develarse sus escandalosos amoríos, ha evitado dar la cara a la prensa.
Lo cierto es que después de ese partido nadie ha vuelto a ver cara a cara al golfista norteamericano, quien según ABC.es se viene recuperando de una verdadera reconstrucción de mandíbula, por los golpes que el deportista calificado recibió de su esposa segundos antes de que sufriera el aparatoso accidente en Florida.
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