Uno de los demandantes es Saúl Juárez Flores, quien asegura sufrir de cáncer y denunció a Antamina por darle solo una máscara de papel y no una de plástico para protegerse de la contaminación.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) recibió este lunes denuncias de mineros de Perú, que sufren enfermedades porque su organismo tiene una concentración de metales pesados por encima de los estándares normales debido supuestamente a su trabajo.
Dos mineros, Saúl Alejandro Juárez Flores y Alán Richard Herrera, testificaron este lunes durante el 169 periodo de sesiones de la CIDH, que se celebra en la Universidad de Colorado, en Boulder (EE.UU.).
Juárez Flores aseguró que sufre cáncer debido al arsénico que absorbió involuntariamente por la boca y la piel mientras trabajaba para la Minera Antamina en una zona del Callejón de Conchucos, que se encuentra a una altitud de unos 4.000 kilómetros por encima del nivel del mar.
Ante la altitud y la falta de oxígeno, los mineros usaban para protegerse solo una máscara de papel, en vez de una mascarilla de plástico con filtros destinados a impedir la absorción de metales.
"Me rebela, me indigna que empresas tan grandes, tan poderosas, vengan al Perú a ser cada vez más ricas y que nos agredan de esta forma, que nos hagan daño no solamente a mí, sino a mi familia y a toda la familia minera del Perú. Y, encima de eso, que nos traten de ignorantes", expresó Juárez Flores.
"Ruleta rusa"
El hombre, de 53 años, comenzó a trabajar para la Minera Antamina en 1999 y fue despedido en 2011 después de que le diagnosticaran el cáncer. Junto a él, se sentó Alán Richard Herrera, de 44 años y que trabajó para la Minera Yanacocha entre 1998 y 2012.
En declaraciones a Efe, Richard Herrera dijo sentirse en una "ruleta rusa", porque su cuerpo tiene concentraciones de mercurio, arsénico y talio por encima de los niveles normales y no sabe qué consecuencias tendrá para su salud o la de sus hijos. El minero tiene tres hijos y uno de ellos, de 12 años, tuvo problemas de caída de cabello cuando era más pequeño.
Durante la audiencia los representantes del Estado peruano aseguraron que el Gobierno, y en concreto el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, tienen en marcha mecanismos y regulaciones para atender los problemas que puedan derivarse de la inversión minera, que ocupa un importante lugar en la economía peruana.
De hecho, de enero a mayo del 2018, las inversiones mineras ascendieron a 1,569 millones de dólares, lo que supone un incremento del 34,3 % con respecto al mismo periodo del año anterior.
(Información de EFE)
Respuesta de Antamina
Tras la información revelada, la empresa minera emitió un comunicado en donde niega que Juárez Flores haya contraído cáncer "como consecuencia de una presunta intoxicación de metales pesades" durante su labor.
Además, indica que ello quedó demostrado tras realizarle una serie de evaluaciones médicas y toxicológicas. "Las mismas que indican que Saúl Juárez no tuvo exposición tóxica a metales pesados y que la enfermedad oncológica que padece no guarda relación con las labores que realizó en nuestra empresa".
También señala que si bien no hay una relación laboral vigente, "Antamina mantuvo el seguro médico privado EPS para él y su familia por casi cinco años más luego de su desvinculación laboral, apoyándolo incluso a pesar de sus equivocadas acusaciones públicas".
Comparte esta noticia