El periodista Jeffrey Goldberg insistió en que no hay manera de "malinterpretar" la frase de Castro de que el modelo cubano "ya no funciona" ni para los mismos cubanos.
El periodista estadounidense Jeffrey Goldberg, quien entrevistó a Fidel Castro la semana pasada, dijo que le sorprende que el ex gobernante de Cuba reclame que fue "malinterpretado" cuando dijo que el modelo cubano ya no funciona.
Durante una conferencia telefónica con periodistas, Goldberg insistió hoy en que no hay manera de "malinterpretar" la frase de Castro del martes pasado de que el modelo cubano "ya no funciona" ni para los mismos cubanos.
"No sé cómo uno puede interpretar la cita:"El modelo cubano ya no funciona ni siquiera para nosotros" como su opuesto", dijo Goldberg en el encuentro organizado por el Consejo de Relaciones Exteriores (CFR, por su sigla en inglés), un centro de estudios.
Goldberg, escritor de la revista mensual The Atlantic Monthly, entrevistó a Castro en La Habana la semana pasada y, según explicó en su blog el martes último, éste comentó acerca del modelo cubano: "ya no funciona ni siquiera para nosotros".
Al día siguiente, en la Universidad de La Habana, Castro matizó sus declaraciones y recordó que es el capitalismo el que ha fracasado. Castro no negó haber dicho la frase, pero explicó que "representaba exactamente lo contrario" de lo que Goldberg, y su intérprete, Julia Sweig, entendieron.
Goldberg dijo hoy que está "un poco sorprendido" por la rectificación de Castro, "no sólo porque ha dicho cosas parecidas antes, sino también porque la realidad sobre el terreno en Cuba es tal que el modelo cubano no está funcionando, y por eso están comenzando un experimento de privatización a gran escala".
Sweig, analista de CFR que acompañó a Goldberg a La Habana, explicó que el mensaje de Castro "a ciertos grupos internos" es que las reformas económicas en Cuba "no significan" que se esté "importando el capitalismo al estilo estadounidense".
El Gobierno cubano, liderado por Raúl Castro desde julio de 2006 tras una enfermedad gastrointestinal de Fidel, anunció el lunes un recorte de 500.000 empleos públicos para el primer semestre de 2011 que permitirá que muchos de esos trabajadores puedan montar pequeños negocios privados.
Sweig dijo hoy a los periodistas que esa reforma supone un reconocimiento de que las abultadas burocracia estatal y nómina del Estado "ya no son sostenibles".
Sin embargo, señaló que "las cosas se mueven muy despacio en Cuba" y que es difícil predecir hasta qué punto llegarán las reformas anunciadas desde julio pasado.
Sweig enfatizó que aunque Fidel Castro se está labrando un lugar en la arena internacional, es su hermano, Raúl, quien lleva las riendas de los asuntos internos y de la política exterior de Cuba.
En ese sentido, Sweig consideró que Fidel Castro "no está bloqueando los esfuerzos de su hermano" ni el camino pautado por su Gobierno.
En las últimas semanas, varios medios locales habían indicado que el Gobierno de Barack Obama pronto anunciaría la flexibilización de los viajes académicos, culturales y religiosos a Cuba, en respuesta a la puesta en libertad de varios presos políticos.
Sin embargo, el Gobierno estadounidense no lo ha hecho.
En paralelo, el portavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley, reiteró la postura del Gobierno de Washington de que se están "buscando acciones de Cuba", pero dijo no tener ningún "comentario en particular" a las reformas anunciadas en La Habana.
EFE
Durante una conferencia telefónica con periodistas, Goldberg insistió hoy en que no hay manera de "malinterpretar" la frase de Castro del martes pasado de que el modelo cubano "ya no funciona" ni para los mismos cubanos.
"No sé cómo uno puede interpretar la cita:"El modelo cubano ya no funciona ni siquiera para nosotros" como su opuesto", dijo Goldberg en el encuentro organizado por el Consejo de Relaciones Exteriores (CFR, por su sigla en inglés), un centro de estudios.
Goldberg, escritor de la revista mensual The Atlantic Monthly, entrevistó a Castro en La Habana la semana pasada y, según explicó en su blog el martes último, éste comentó acerca del modelo cubano: "ya no funciona ni siquiera para nosotros".
Al día siguiente, en la Universidad de La Habana, Castro matizó sus declaraciones y recordó que es el capitalismo el que ha fracasado. Castro no negó haber dicho la frase, pero explicó que "representaba exactamente lo contrario" de lo que Goldberg, y su intérprete, Julia Sweig, entendieron.
Goldberg dijo hoy que está "un poco sorprendido" por la rectificación de Castro, "no sólo porque ha dicho cosas parecidas antes, sino también porque la realidad sobre el terreno en Cuba es tal que el modelo cubano no está funcionando, y por eso están comenzando un experimento de privatización a gran escala".
Sweig, analista de CFR que acompañó a Goldberg a La Habana, explicó que el mensaje de Castro "a ciertos grupos internos" es que las reformas económicas en Cuba "no significan" que se esté "importando el capitalismo al estilo estadounidense".
El Gobierno cubano, liderado por Raúl Castro desde julio de 2006 tras una enfermedad gastrointestinal de Fidel, anunció el lunes un recorte de 500.000 empleos públicos para el primer semestre de 2011 que permitirá que muchos de esos trabajadores puedan montar pequeños negocios privados.
Sweig dijo hoy a los periodistas que esa reforma supone un reconocimiento de que las abultadas burocracia estatal y nómina del Estado "ya no son sostenibles".
Sin embargo, señaló que "las cosas se mueven muy despacio en Cuba" y que es difícil predecir hasta qué punto llegarán las reformas anunciadas desde julio pasado.
Sweig enfatizó que aunque Fidel Castro se está labrando un lugar en la arena internacional, es su hermano, Raúl, quien lleva las riendas de los asuntos internos y de la política exterior de Cuba.
En ese sentido, Sweig consideró que Fidel Castro "no está bloqueando los esfuerzos de su hermano" ni el camino pautado por su Gobierno.
En las últimas semanas, varios medios locales habían indicado que el Gobierno de Barack Obama pronto anunciaría la flexibilización de los viajes académicos, culturales y religiosos a Cuba, en respuesta a la puesta en libertad de varios presos políticos.
Sin embargo, el Gobierno estadounidense no lo ha hecho.
En paralelo, el portavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley, reiteró la postura del Gobierno de Washington de que se están "buscando acciones de Cuba", pero dijo no tener ningún "comentario en particular" a las reformas anunciadas en La Habana.
EFE
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