Corte Constitucional de Colombia decidió se dé cátedra en colegios sobre el derecho al aborto en caso de violación, malformación del feto y riesgo de la vida de la madre.
Una polémica se inició hoy entre diferentes sectores de la sociedad colombiana por la decisión de la Corte Constitucional de dar cátedra en los colegios y hacer campañas sobre el derecho al aborto en caso de violación, malformación del feto y riesgo de la vida de la madre.
La Iglesia colombiana señaló que con esta decisión, la Corte "está buscando todas las vías posibles para incrementar el aborto" en el país, según el presidente del Tribunal Eclesiástico, monseñor Libardo Ramírez, en una entrevista con el diario El Nuevo Siglo.
Según Ramírez, la Corte pretende aprobar el derecho "a matar a un hijo" sin imponer penas, y además se está adjudicando "atribuciones" que no tiene para "dar órdenes" a la Procuraduría y a los profesores.
De esta misma opinión es el abogado Carlos Fradique-Méndez, para quien la Corte "se ha excedido en el ejercicio de sus funciones de control institucional y ha invadido campos que son exclusivos del Congreso", según publica hoy el diario El Tiempo.
Fradique-Méndez afirma que, aunque la Corte "no tenía facultades", despenalizó el aborto en tres supuestos, pero que "la regulación sobre qué casos podría el aborto no ser delito es Competencia del Congreso".
Sin embargo, el mismo diario recoge la visión de Mónica Roa, directora de Women"s Link Worldwide, quien defiende la decisión de la Corte porque "está resolviendo un problema de derechos fundamentales que no había podido resolver el Congreso".
"La falta de respuesta política es la que viene a suplir la Corte, pues se trata de derechos fundamentales que hacen parte de su función constitucional", aseguró Roa.
El representante de la Iglesia califica de "anticonstitucional" que exista un derecho simplemente porque no hay pena: "No se castiga a quien mata a los niños, pero sí se quiere castigar a quien no quiere matarlos", añade.
La interrupción voluntaria del embarazo fue ilegal en Colombia hasta el año 2006, momento en que la Corte Constitucional lo despenalizó en tres supuestos: violación, malformación del feto y riesgo de la vida de la madre.
Estos supuestos siguen sin ser válidos para la Iglesia, ya que Ramírez considera que sobre la violación "cualquier muchacha que quede embarazada puede inventárselo"; en cuanto a la malformación "hay medios para enderezar esos fetos" y sobre el riesgo de la madre "es porque en todo embarazo hay peligro". EFE
La Iglesia colombiana señaló que con esta decisión, la Corte "está buscando todas las vías posibles para incrementar el aborto" en el país, según el presidente del Tribunal Eclesiástico, monseñor Libardo Ramírez, en una entrevista con el diario El Nuevo Siglo.
Según Ramírez, la Corte pretende aprobar el derecho "a matar a un hijo" sin imponer penas, y además se está adjudicando "atribuciones" que no tiene para "dar órdenes" a la Procuraduría y a los profesores.
De esta misma opinión es el abogado Carlos Fradique-Méndez, para quien la Corte "se ha excedido en el ejercicio de sus funciones de control institucional y ha invadido campos que son exclusivos del Congreso", según publica hoy el diario El Tiempo.
Fradique-Méndez afirma que, aunque la Corte "no tenía facultades", despenalizó el aborto en tres supuestos, pero que "la regulación sobre qué casos podría el aborto no ser delito es Competencia del Congreso".
Sin embargo, el mismo diario recoge la visión de Mónica Roa, directora de Women"s Link Worldwide, quien defiende la decisión de la Corte porque "está resolviendo un problema de derechos fundamentales que no había podido resolver el Congreso".
"La falta de respuesta política es la que viene a suplir la Corte, pues se trata de derechos fundamentales que hacen parte de su función constitucional", aseguró Roa.
El representante de la Iglesia califica de "anticonstitucional" que exista un derecho simplemente porque no hay pena: "No se castiga a quien mata a los niños, pero sí se quiere castigar a quien no quiere matarlos", añade.
La interrupción voluntaria del embarazo fue ilegal en Colombia hasta el año 2006, momento en que la Corte Constitucional lo despenalizó en tres supuestos: violación, malformación del feto y riesgo de la vida de la madre.
Estos supuestos siguen sin ser válidos para la Iglesia, ya que Ramírez considera que sobre la violación "cualquier muchacha que quede embarazada puede inventárselo"; en cuanto a la malformación "hay medios para enderezar esos fetos" y sobre el riesgo de la madre "es porque en todo embarazo hay peligro". EFE
Comparte esta noticia