El presidente de Estados Unidos recibió una avalancha de críticas por su política de "tolerancia cero" hacia la inmigración ilegal lanzada a principios de mayo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles un decreto para poner fin a la separación de las familias de inmigrantes en la frontera. Así frenó una práctica que generó el rechazo nacional e internacional y malestar dentro del propio partido republicano.
La normativa de separar las familias inmigrantes fue implementada por las autoridades fronterizas estadounidenses para disuadir a núcleos familiares extranjeros a tratar de ingresar clandestinamente al país, junto con sus hijos menores de edad.
Entre octubre de 2017 y abril del 2018, unos 700 niños fueron separados de sus padres y retenidos por semanas o enviados a centros de acogida antes de poder volver a reunirse con sus familias. La medida no tuvo impacto en el número de nuevos inmigrantes. Es así que Trump ordenó medidas más rígidas.
'Tolerancia cero'
El 7 de mayo el fiscal general y secretario de Justicia, Jeff Sessions, anunció la política de "tolerancia cero". Según ella, toda persona que ingrese clandestinamente resulta detenida y se enfrenta a cargos criminales. Cuando se trata de familias, los niños son separados de los padres.
Los casos se dispararon exponencialmente desde que el gobierno pasó a arrestar a los inmigrantes que cruzan de forma clandestina la frontera sur del país. Según cifras oficiales, entre el 5 de mayo y el 9 de junio, 2.342 niños y jóvenes inmigrantes han sido separados de sus padres en la frontera sur.
Niños separados
Los inmigrantes que entran a Estados Unidos ilegalmente por el límite con México, así como los que lo hacen pidiendo asilo, son enviados a un "centro de detención" de la patrulla fronteriza. Allí, son retenidos en espacios cercados por vallas metálicas, divididos por edad y género.
Los hermanos también pueden quedar separados. Esto puede durar 72 horas, hasta que el caso es resuelto o los niños son enviados a refugios del Departamento de Salud.
La red existente de alrededor de 100 centros de detención juvenil, en donde recluyen a jóvenes que han cruzado solos la frontera o en compañía de sus padres, colapso por la llegada continua de niños separados de sus padres.
El revelador audio
La organización ProPublica difundió el lunes unas grabaciones de audio desde dentro de una de las instalaciones de la Patrulla Fronteriza en la que se podía escuchar a los niños, recién separados de sus padres al cruzar el límite con México de forma ilegal. Los niños lloraban y gritaban desconsolados "papi" y "mami"; mientras, un agente bromeaba: "Tenemos una orquesta aquí".
Una de las voces que más destaca es de una angustiada niña salvadoreña de seis años que suplica que llamen a su tía. "Me puedo ir con mi tía por lo menos", dice la pequeña.
Fotografías desgarradoras y la grabación de audio provocaron una tormenta de oposición al presidente Trump por su manejo de la inmigración ilegal.
Las reacciones
Varias voces se alzaron contra esta política de Trump. La primera ministra británica Theresa May, consideró "profundamente perturbadoras" las imágenes de "niños detenidos en lo que parecen ser jaulas". Su par canadiense Justin Trudeau calificó como "inaceptable" esta política.
El papa Francisco envió un tuit en el que señala que "la dignidad de una persona no depende de que sea ciudadano, migrante o refugiado. Salvar la vida de quien escapa de la guerra y de la miseria es un acto de humanidad".
México calificó como "cruel e inhumana" la ley estadounidense de "tolerancia cero". "Quiero a nombre del gobierno y del pueblo de México expresar nuestra más categórica y enérgica condena a una política cruel e inhumana", dijo el canciller mexicano Luis Videgaray.
Trump revierte medida
Tras la ola de críticas, Trump firmó un decreto destinado a poner fin a la controvertida separación de las familias de inmigrantes en la frontera. "Se trata de mantener juntas a las familias", dijo Trump en la ceremonia de firma en la Oficina Oval, después de anunciar más temprano, en un dramático cambio de su discurso, que iba a poner fin a esta controvertida medida.
"Tendremos fronteras muy fuertes pero mantendremos juntas a las familias", dijo el presidente de Estados Unidos. "Creo que cualquiera con un corazón podría actuar de la misma manera", agregó, y señaló que su hija Ivanka y su esposa Melania tenían sentimientos muy fuertes sobre el tema. (EFE y AFP)
Comparte esta noticia