La cantante mexicana Alejandra Guzmán invocó hoy la ayuda de los dioses en el estreno de su nuevo disco, "Único", para iniciar una nueva etapa en su carrera.
La cantante mexicana Alejandra Guzmán invocó hoy la ayuda de los dioses en el estreno de su nuevo disco, "Único", para iniciar una nueva etapa en su carrera.
"Ahorita le estoy pidiendo permiso a los dioses para poder empezar una nueva etapa en mi carrera", dijo la cantante al presentar su nuevo trabajo ataviada con un penacho de plumas prehispánico.
"Después de veinte años, después de éxitos, lágrimas, y también fracasos, todo me ha enseñado algo", afirmó.
"Quiero que termine este año porque ha sido un año muy difícil para mí, creo que tengo mucha suerte de contarlo, de estar viva, de darme cuenta de que mi cuerpo es muy fuerte", se confesó.
La artista expresó su deseo de sacar lo bueno de "todo lo malo" que le ha pasado.
La cantante, recuperada de sus recientes problemas de salud por una intervención estética mal practicada, bailó y se exhibió provocativa durante el espectáculo que ofreció.
Durante el "show" ofreció algunas de sus canciones más conocidas, como "Mírala, míralo", otras más recientes ("Soy sólo un secreto") y varios temas de su nuevo álbum, como el primer sencillo "Mentiras piadosas".
Este es el decimoquinto álbum de su carrera y fue grabado en Londres el pasado agosto. Desde finales de noviembre se puso a la venta en México, Centroamérica y Estados Unidos.
A lo largo de sus veinte años de carrera la cantante, que cuenta con un Grammy Latino a la Mejor Voz Femenina, ha vendido más de ocho millones de discos.
Recientemente, una intervención de cirugía estética mal practicada estuvo a punto de costarle la vida.
La inyección de una sustancia llamada "cemento para huesos" en los glúteos le provoco una severa infección que la mantuvo casi dos semanas en estado grave en el hospital y requirió de cirugía.
La dueña de la clínica donde se le practicó la intervención ingresó en prisión por su presunta negligencia a Alejandra Guzmán, que pide un millón de dólares de compensación, y a al menos otras 21 personas.
EFE
"Ahorita le estoy pidiendo permiso a los dioses para poder empezar una nueva etapa en mi carrera", dijo la cantante al presentar su nuevo trabajo ataviada con un penacho de plumas prehispánico.
"Después de veinte años, después de éxitos, lágrimas, y también fracasos, todo me ha enseñado algo", afirmó.
"Quiero que termine este año porque ha sido un año muy difícil para mí, creo que tengo mucha suerte de contarlo, de estar viva, de darme cuenta de que mi cuerpo es muy fuerte", se confesó.
La artista expresó su deseo de sacar lo bueno de "todo lo malo" que le ha pasado.
La cantante, recuperada de sus recientes problemas de salud por una intervención estética mal practicada, bailó y se exhibió provocativa durante el espectáculo que ofreció.
Durante el "show" ofreció algunas de sus canciones más conocidas, como "Mírala, míralo", otras más recientes ("Soy sólo un secreto") y varios temas de su nuevo álbum, como el primer sencillo "Mentiras piadosas".
Este es el decimoquinto álbum de su carrera y fue grabado en Londres el pasado agosto. Desde finales de noviembre se puso a la venta en México, Centroamérica y Estados Unidos.
A lo largo de sus veinte años de carrera la cantante, que cuenta con un Grammy Latino a la Mejor Voz Femenina, ha vendido más de ocho millones de discos.
Recientemente, una intervención de cirugía estética mal practicada estuvo a punto de costarle la vida.
La inyección de una sustancia llamada "cemento para huesos" en los glúteos le provoco una severa infección que la mantuvo casi dos semanas en estado grave en el hospital y requirió de cirugía.
La dueña de la clínica donde se le practicó la intervención ingresó en prisión por su presunta negligencia a Alejandra Guzmán, que pide un millón de dólares de compensación, y a al menos otras 21 personas.
EFE
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