Critica a las cantantes folklóricas que buscan escándalos para darse a notar
La voz de María Alvarado Trujillo, "Pastorita Huaracina" se apagó hace ocho años, sin embargo, sigue viva en el corazón de su pueblo, que lloró y bailó a ritmo de huaynos como "Así canta Ancash", "El borracho", "Quisiera quererte", entre otros. Pastorita ha pasado a la inmortalidad y pese que en el ambiente andino aparecieron "reinas de corazones o de parranditas", "diosas hermosas", "mecánicas del folclore" y hasta la versión peruana de Gloria Trevi, ni una ha podido ocupar el lugar de quien fue considerada Embajadora y Decana de
"Se impresionaría. Ella denunciaría de alguna manera a la nueva hornada de artistas. Con todo el respeto que ellas se merecen en la manera cómo desarrollan su arte, pero por muchas de ellas el pueblo no conoce el significado verdadero de la palabra folclore. Es una pena que las llamen folcloristas de manera despectiva, porque no les tienen respeto. Están tan unidas a los programas cómicos que es preferible que mi madre no haya visto esto, porque para ella, sus polleras eran sagradas", señaló en alusión a las continuas apariciones de intérpretes vernaculares en espacios cómicos con sus "clones" travestis.
La heredera de "Pastorita" se llenó de orgullo al recordar en el programa "En escena" de RPP que su madre fue la pionera en aparecer en radio y televisión.
"Lo digo también con humildad y con orgullo porque mi madre nunca tuvo que promocionarse ni buscarse afectos e influencias para que se le abrieran las puertas". Luz Elena encabezó ayer una misa en el templo del Convento de Santo Domingo al conmemorarse ocho años de la muerte de la intérprete vernacular, seguido de un pasacalle que concluyó en la "Alameda Chabuca Granda" en donde diversos artistas andinos y seguidores de "Pastorita" se reunieron para darle merecido homenaje.
Algo más: Luz Elena sueña con ver una sala dedicada a su madre en el Museo de
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