El CD trae clásicos como ´At last´ que se escuchó en la cena de inauguración de mandato del presidente Obama, y ´All the Way´, popularizada por Frank Sinatra en 1957.
La legendaria Liza Minnelli, que ha conquistado al mundo con sus vibrantes y únicas interpretaciones, muestra su lado más íntimo en "Confession", el nuevo disco en el que plasmó sus temas preferidos acompañada por su inseparable pianista Billy Stritch.
El álbum está compuesto por conocidos clásicos estadounidenses como "At last" que en la década de 1940 grabaron estrellas como Nat King Cole y que se escuchó durante la cena de inauguración de mandato del presidente Barack Obama hace dos años, y "All the Way", popularizada por Frank Sinatra en 1957, así como otros menos conocidos.
"Son canciones que aprendí a través de mi vida y que yo amaba", señaló a la prensa la cantante, de 64 años, sobre su primer álbum de estudio en catorce años, y que realizó a principios de 2010 mientras se recuperaba de una cirugía de rodilla que la obligó a cancelar presentaciones y al reposo absoluto.
"Éra tímida de niña y las canciones decían lo que yo no sabía decir", afirmó la artista, quien confesó que de niña se entretenía aprendiendo las letras de las canciones.
"Era fascinante", aseguró. Algunas de las canciones se remontan a su infancia, cuando, siendo una niña, el hogar de sus padres Vincent Minnelli y Judy Garland era el punto de encuentro de otras legendarias figuras como los compositores Irving Berlin, Ira Gerwishin, que fue su padrino, y Oscar Levant, que además era actor.
"Todo el mundo iba a mi casa y yo no sabía que eso era poco común, eran visitas casuales", comentó Minnelli en declaraciones a la prensa sobre su nuevo proyecto musical, que también incluye temas que solía cantar con amigos en veladas que terminaban en torno a un piano.
Minnelli, que ha descrito su forma de cantar en este álbum como "íntima y sexy", aseguró que no fue difícil elegir los temas al insistir en que "son canciones que amo, que cuando las oyes, te acuerdas de cuando la escuchaste la primera vez y lo que estabas haciendo".
Para este álbum, la estrella de "Cabaret", ganadora de los mayores premios del espectáculo en EE.UU.: un Óscar, un Emmy, un Grammy y un Tony, también eligió "He"s a Tramp", que escuchó en la película de Disney "La dama y el vagabundo", de la que dijo le encantó, y en la que una perrita pequinés cantaba el tema.
También "I must have That Man", que escuchó cantar a su madrina Kay Thompson. La icónica cantante admite que una parte fundamental en este proyecto es su pianista Stritch, al que le unen veinte años de trabajo en conjunto y que la motivó a realizarlo. Minnelli, que se visualiza por mucho tiempo en los escenarios, se manifestó complacida por la respuesta positiva que ha encontrado para su nuevo proyecto, entre ellos el famoso intérprete Tony Bennett.
Igualmente aseguró que al celebrar seis décadas en los escenarios tal vez lo mejor de su carrera "no lo he hecho todavía".
"Sólo hago lo mejor que puedo", dijo la recordada Sally Bowles personaje al que Minnelli le dio vida en Cabaret, al tiempo que aseguró que de su carrera le gusta "hacer de todo, pero amo los espectáculos en vivo".
Minnelli, cuya gira ya comenzó en EE.UU. y últimamente se le ha visto en la pantalla en un cameo de "Sex and The City 2", hizo ante la prensa neoyorquina una íntima presentación en la que volvieron a escucharse los aplausos en una interpretación que concluyó con "Confession", que da título al disco.
EFE
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